LIGA ACB
Nuevos jugadores, o no tanto
Por José Luis Ajero2 min
Deportes21-09-2001
La ACB aspira este año ha consolidarse de una vez por todas como la mejor Liga de baloncesto de Europa. Será complicado, pues la joya de la corona se ha ido a la NBA. Mientras Pau Gasol se pega con las megaestrellas de la NBA, en España queda su legado. Éste no es otro que todos los de su quinta: varios de ellos se han hecho mayores en Turquía peleando por metal, y otros aún vienen por detrás y quieren mejorar.
Está surgiendo una nueva generación de jugadores jóvenes que mandan en sus equipos con muy pocos años, que desequilibran y que entienden el juego como diversión y espectáculo. Ellos deben ser la base de esta primera liga del milenio, pero deben vérselas con lo que llega de fuera. Para no perder continuidad con los últimos años, siguen desembarcando en los diferentes equipos lo mejorcito del mercado que no se llama NBA. Además, la tendencia de fichar calidad ya no es cosa de dos. Al carro de adinerados se han sumado Unicaja, Tau, Pamesa, Adecco Estudiantes y Caja San Fernando. Estos tienen como objetivo atacar los puestos del privilegio oligárquico establecido por culés, a pesar de no contar con Gasol, y merengues. La misión no va a ser fácil, más que nada porque éstos ya han decidido que la ACB se queda pequeña y hay que dar un pasito más: Euroliga. Quizás por ello, Scariolo ha traído para su Madrid un par de tipos duros rebotados de los Estados Unidos que van a asegurar a los Albertos que lo que se les salga ellos lo meten. O que Aíto, que sigue un año más, quiere que la Navarro sea la Bomba del Barça y que Ekonomou forme pareja helena junto a Rentzias en ataque, o que Ademola Okulaja se parezca un poco al de Girona del año pasado. Lo bueno es que todos piensan en ganar o construyen equipos para ello, lo malo es que todos los equipos se están armando hasta los dientes. Mención especial para dos con ganas de guerra, el Lobos Cantabria, de nombre americanizado y plantilla a base de nacionales, y el Caprabo Lleida, que a base de insistir y pelear ha decidido no ser el cuarto equipo de Cataluña. Y ellos no son más que un ejemplo más de lo que han hecho los 18 equipos en liza. Así que pocas confianzas convienen para comenzar con buen pie la ACB: posiblemente, la mejor Liga de Europa.