LETRAS Y LITERATURA
El Día del Libro es mucho más que la entrega del Premio Cervantes en Alcalá de Henares
Por Roberto González García2 min
Cultura23-04-2005
Esto augura un nuevo tema musical de Los Lunnis, que seguro liderará las listas de ventas de este país, como sus anteriores trabajos musicales, Buenas noches, hasta mañana y Despierta ya.
Como este año es el cuarto centenario de la publicación en Valladolid de Las aventuras del ingenioso hidalgo Don Quijote, todos los actos del Día del Libro parecen destinados a la mayor gloria de la pluma de Cervantes y de su más famosa obra, aunque no conviene olvidar que el autor es mucho más que las aventuras de un castellano aventurero. Como es tradicional, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid se ha leído durante 24 horas el Quijote. La lectura comenzó con un cuento de Borges, y muchos son los famosos y personajes anónimos que se han acercado hasta esta institución para leer unos pasajes de la obra. incluso varios esperantistas han leído fragmentos de esta obra en la lengua internacional de Zamenhoff. En una nota de prensa dirigida a los medios de comunicación, el Partido Popular afirma que "queremos recordar que leer es, sobre todo, un canto a la libertad, a la libertad individual, de pensamiento y de conciencia". También se añade que "si Don Quijote llega a ese libertad personal -que parece locura- es por haber leído tantos libros. Y así, comprendemos que la cultura, la lectura y los libros son fuente de libertad personal". Últimamente el Día del Libro pretende ser relacionado como Día de los Derechos de Autor. Este nombre completo no parece calar entre la población, que sigue diciendo "día del Libro" a secas, mientras se regalan libros y rosas en la festividad de San Jorge. En el mundo anglosajón se eligió esta fecha por el fallecimiento de William Shakespeare (1616), en el mundo de las letras hispanas, por el obituario de Miguel de Cervantes, el Manco de Lepanto(1616); que no era tan manco si hacemos caso a las últimas investigaciones. Según ellas, Cervantes continuó en la reserva del Ejército tras la batalla de Lepanto, algo que no hubiera sido viable si realmente se hubiera quedado manco como afirma la tradición. Curiosamente, aunque pudiera parecer que Cervantes y Shakespeare fallecieran el mismo día (23 de abril de 1616) no fue así, sino que debido a cambios de calendario en Inglaterra por la reforma anglicana, hicieron coincidir ambas fechas. Un detalle que hace de este día algo más especial.