Una de cada tres mujeres abandona el trabajo por motivos familiares

Por Alfredo L. Zamora2 min

Sociedad08-03-2005

Los árduos esfuerzos por alcanzar la igualdad laboral entre hombres y mujeres van obteniendo resultados positivos cada año. Pese a estos avances que han reducido significativamente las diferencias, los datos aún continúan poniendo de manifiesto que queda mucho camino por recorrer. Una de cada tres mujeres se ve obligada a abandonar su trabajo por la familia.

Según se desprende de los datos referidos al último trimestre de 2004, la tasa de paro femenina duplica a la de los hombres, y además estas mujeres trabajadoras se concentran en profesiones feminizadas como la sanidad, la educación y la limpieza, limitando así sus posibilidades de desarrollo profesional. A día de hoy, los hombres de la Unión Europea cobran un 15 por ciento más que las mujeres. Más del 50 por ciento de los hombres tienen subordinados a su cargo, mientras que esta cifra se reduce al 31 por ciento en las mujeres. Esta situación que dificulta la compaginación de la vida laboral y familiar, que hace que en muchas ocasiones se apueste por trabajos a tiempo parcial. Para solucionar esta situación se requeriría una mejora de la atención a hijos menores de edad, personas mayores y discapacitados, individuos que requieren cuidados que normalmente recaen en la mujer. Pero la principal forma de erradicar esta realidad reside en el fomento de la corresponsabilidad entre el hombre y la mujer en el trabajo doméstico, para así llegar a un equilibrio entre ambos. El Partido Popular ha presentado en el Congreso de los Diputados una proposición de ley de conciliación de la vida familiar, laboral y personal. Entre otras medidas contempla el aumento de la deducción por maternidad a 150 euros mensuales para el segundo hijo y a 200 euros para el tercero y sucesivos, además de la paga actual de 100 euros mensuales. También se estudia la posibilidad de suspensión del contrato de trabajo temporalmente a causa de la maternidad con reserva de puesto. Se apuesta por la creación en los Presupuestos Generales del Estado de un Fondo Nacional para guarderías que se ubicarán en parques empresariales y zonas industriales, ayudando así a compaginar el trabajo con la vida familiar. Son muchos años de trabajo que no pueden acabar instantáneamente con una situación de diferencias que viene desde los orígenes de la humanidad. La impaciencia no puede nublar el optimismo que se desprende de los datos, los cuales reflejan un ascenso imparable de la mujer en el mundo laboral. La igualdad está ahí, pero no se alcanzará sólo con el trabajo de instituciones o colectivos sociales, es un fin común de toda la población.