EMPRESAS
La CE permite a Repsol YPF la compra de la filial de gases de Shell en Portugal
Por Javier de la Fuente
2 min
Economía05-03-2005
La presencia española en el mercado del petróleo portugués aumenta. La Comisión Europea (CE) ha dado el visto bueno a la operación por la que Repsol Butano adquirirá la filial de gases licuados de Shell en Portugal.
Después de consolidarse en el mercado hispanoamericano, la petrolera española afianza ahora su posición en el país vecino. Desde que la angloholandesa Shell anunciara la venta de sus gasolineras en la península Ibérica, Repsol YPF no ocultó su interés por aumentar su cuota de mercado. Tras meses de negociación, el pasado mes de junio Repsol adquirió las gasolineras de Shell en el país luso. Ahora, continúa su escalada en el mercado portugués al hacerse con la filial de Shell en el sector de gases licuados (GLP). Esta operación, aprobada por la CE, convierte a Repsol en la tercera operadora en el mercado de GLP –pasa de tener el cinco por ciento de cuota de mercado al 21 por ciento-, por detrás de Galp y BP, con una producción total que asciende hasta las 194.000 toneladas. Asimismo, Repsol adquiere dos plantas embotelladoras de GLP, la de Matosinhos y la de Batánica, que en total suman una capacidad de almacenaje de 6.600 toneladas. El mercado portugués de GLP está liderado por la petrolera lusa Galp. Repsol, que compite en este mercado desde el año 1994, suministraba este gas desde sus refinerías españolas y hasta hace poco carecía de infraestructuras en Portugal. Según la Comisión Europea “el crecimiento de Repsol en el mercado portugués se ha visto obstaculizado por la ausencia de estas infraestructuras, lo que elevaba sus costes de transporte y limitaba su capacidad operativa”. El acuerdo aprobado por la CE se hará efectivo una vez que las autoridades europeas de competencia otorguen los permisos necesarios. Aunque Shell se haya desprendido de varios de sus activos en el mercado portugués, la compañía ha anunciado su interés en seguir con su presencia en dicho país, a través de su negocio de lubricantes y de su terminal de distribución situada en la isla portuguesa de Madeira.