CRUDO
El petróleo alcanza su máximo histórico por la crisis de Yukos
Por Raquel Ibáñez
2 min
Economía31-07-2004
Hace 21 años que el precio del crudo no estaba tan alto. A la crisis por la demanda de petróleo se le ha sumado que una de las principales compañías productoras, Yukos, amenaza con el cierre.
Los precios del petróleo están llegando a los máximos de los últimos años. Sólo este año han aumentado más de un 30 por ciento. A esto se le une la crisis de Yukos. Una de las compañías más grandes del mundo amenaza con parar la producción. Esto ha generado gran preocupación sobre si la limitada capacidad de producción mundial restante podrá satisfacer la creciente demanda. El miedo se ha visto reflejado en las bolsas. El oro negro se ha llegado a situar a 43,05 dólares el barril, superando el máximo alcanzado hace 21 años cuando llegó a los 42,45 dólares. El Ministerio de Justicia ruso niega que se haya prohibido a las filiales de la petrolera Yukos extraer, refinar y vender. De hecho, el director adjunto de la empresa, Andréi Beliakov, ha dicho que sólo prohibieron "operaciones de venta de bienes e inmuebles de tres filiales de la compañía". Pero el temor de que Yukos pudiera dejar de suministrar crudo justo cuando los países consumidores empiezan a almacenar para el invierno pesa más que cualquier desmentido. En este momento, casi todos los productores del mundo están extrayendo a toda máquina entre 1,5 y dos millones de barriles diarios para intentar contrarrestar los problemas de demanda y escasez. Si Yukos acabara con su producción, el déficit se situaría en 1,7 millones de barriles diarios. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha manifestado también su angustia ante esta situación. Estos últimos aumentos del precio han tenido como consecuencia que la cesta de la OPEP alcanzara su nivel más alto desde la invasión de Kuwait en 1990. Actualmente, este cártel produce 29 millones de barriles diarios, unos 3,5 millones de barriles más que la cuota fijada a comienzos de julio pasado. Pero aquí no acaba la cosa. Los analistas advierten de que los precios pueden dispararse aún más si se producen nuevos cambios en el panorama internacional.