SUECIA
La Policía sueca cambia de presunto asesino de Anna Lindh
Por Salva Martínez Más1 min
Internacional28-09-2003
Al comisario de la Policía en Estocolmo ya se le oyó decir: "siempre existe el riesgo de que hayamos detenido al hombre equivocado". La falta de pruebas que utilizó la Policía en su primer arresto ha llevado a una corrección de supuesto criminal en la investigación.
Claro que mudar de detenido por asesinar a la cabeza de la diplomacia sueca podría costar caro a la Policía de Estocolmo. El abogado del hasta ahora presunto asesino dice que su cliente va a exigir una reparación a la Policía por haberle tenido siete días en una celda aislada, y a los medios de comunicación por haber atentado contra su integridad. Peer Olof Svensson -así se llama el detenido hasta el pasado miércoles- dejó de estar en el punto de mira de unos medios de comunicación que le habían declarado culpable sin tener ninguna prueba. De hecho tenían tan pocas evidencias para acusarle como la P.olicía para arrestarle. Los perfiles físicos y psicológicos describían una persona tal que podría ser cualquier sueco cuya edad estuviera comprendida entre 25 y 35 años. Ahora bien, tras la segunda detención, efectuada el mismo día que Peer Olof Svensson volvía a su casa, la situación parece más clara. Las autoridades dicen tener indicios técnicos que implican directamente al nuevo supuesto magnicida. Aunque según el abogado de éste, su cliente no reconoce los hechos que se le imputan. Tres cosas sí parecen claras del nuevo arrestado, y no son sus adicciones o sus tendencias políticas -como se dijo del anterior acusado- sino su edad, que oscilaría entre 25 y 30 años, sus fijaciones por los personajes públicos y que se ha cortado el pelo.