SIN ESPINAS
Zapatero no miente
Por Javier de la Rosa
2 min
Opinión27-04-2003
No miente quien quiere sino quien sabe. Zapatero, por no dominar, no domina ni las malas artes de la política. En eso también le lleva ventaja Aznar, quien últimamente no le pasa una a nadie. Ahora que le sigo más de cerca me doy cuenta de que nunca ha aspirado a ser un santo, y estoy seguro de que no le importaría reconocerlo. Él nació para gobernar... con todo lo que eso conlleva, ¿verdad? Nuestro presidente controla bien los tiempos políticos, algo casi imposible, por otra parte. Siempre te puede salir un Prestige, una guerra o un Gescartera. Pero en esto ha demostrado también ser un malabarista. También controla muy bien las distancias, sabe poner a pedrojotas y polancos, a ratos y gallardones a la justa, aunque a veces se le olvida, como decía Pablo A. Iglesias en su columna semanal, que “se puede engañar a unos pocos durante mucho tiempo. Incluso se puede engañar a mucha gente durante poco tiempo. Pero engañar a todo el mundo todo el tiempo es imposible”. El presi empieza a preocuparse poco de controlar esa distancia. La soberbia de no visitar Galicia cuando el chapapote estaba todavía caliente, haber hincado la rodilla ante el Papa para no mirarle a los ojos directamente, haber defendido en los tres últimos meses el discurso más falso de su carrera política... Aznar, que nunca en este último periodo ha dado respuestas concretas a preguntas muy concretas, ha dilapidado su credibilidad a base de decir chorradas como que Irak lanzaba mísiles prohibidos a Kuwait al tiempo que el jefe de los inspectores decía que eso era falso. O cuando dijo que la detención de un viejo decrépito e inofensivo que vivía en Irak era la prueba palmaría de que Sadam Hussein y el terrorismo internacional eran una misma cosa. O cuando señaló que la detención en Gerona de 15 moritos con armas químicas, que al final resultó ser detergente, era la constatación y no una fantasía de que los terroristas de Al Qaeda se mueven a sus anchas en nuestro país. También en el primer debate del Parlamento sobre la guerra dijo que España estaba amenazada con atentados por Irak porque Tarek Asiz respondió afirmativamente cuando un grupo de artistas españoles le preguntó que si el apoyo de España a EE.UU. tendría consecuencias para las relaciones entre Irak y nuestro país, hasta entonces tradicionalmente cordiales. Todo eso está en las hemerotecas. Y a pesar de todo, José María Aznar es el “mejor político” que tiene nuestra España. Zapatero, que siempre será un político novel a pesar de llevar más de la mitad de su vida como diputado, no miente porque no sabe.
