CIENCIA
Descubierto el genoma del parásito de la malaria y del mosquito portador
Por Carmen Rosa Fernández
1 min
Sociedad06-10-2002
La comunidad científica mundial está de enhorabuena después de haber conseguido dar un paso esencial en la lucha contra una de las enfermedades más devastadoras del mundo: la malaria. El camino hacia una posible vacuna efectiva se ha abierto gracias al desciframiento del genoma del parásito de la malaria, el Plasmodium falciparum, y del mosquito que lo trasmite, el Anopheles gambiae.
Este parásito, que causa la muerte de tres millones de personas al año, contiene casi 5.300 genes en sus 14 cromosomas y su secuenciación ha sido muy costosa debido a su compleja y variada composición. A medida que se vayan decodificando las diversas proteínas que componen su ADN, los científicos irán especulando sobre los posibles modos de erradicación de la enfermedad. Las hembras del Anopheles gambiae necesitan la sangre humana para producir sus huevos propagando así el paludismo de forma masiva. Por el momento no se conoce vacuna y se usan métodos muy rudimentarios como la quinina o la artemesinina, basada en un remedio milenario chino. Esta dificultad para encontrar remedio radica en la lucha constante entre parásito y mosquito que provoca una continua variación de su carga genética por parte del mosquito para impedir que el parásito se desarrolle en su interior. Por otra parte, el mayor problema de los métodos actuales es la resistencia contra los insecticidas que ha desarrollado el Anopheles. El nuevo hallazgo genético supone un chorro de esperanza hacia una posible victoria de la ciencia sobre la malaria, a pesar de que las estrategias derivadas del genoma no llegarán en corto plazo. De momento se han fijado los objetivos de reducir el número y la vida de los mosquitos, impedir que el parásito se desarrolle en su interior y comprender por qué estos insectos se sienten atraídos únicamente por la especie humana. Otra vía abierta con el genoma es la de crear insectos transgénicos incapaces de desarrollar la enfermedad e introducirlos en el medio.