Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

ANÁLISIS DE ESPAÑA

Todo el mundo lo hace

Fotografía

Por Alejandro RequeijoTiempo de lectura2 min
España21-01-2013

Superada la dictadura tras la Transición y una vez derrotada ETA, España tiene hoy en la corrupción la principal amenaza a su sistema democrático. Es la gran lacra de nuestro tiempo por encima de ninguna otra causa. Por encima incluso de la propia crisis, que no sería tal como es sin la corrupción. Es la batalla de esta generación que pide a gritos un Eliot Ness. Y España como el gran país que es, ha sabido vencer las adversidades que a lo largo de su Historia se le han puesto en el camino. En este país se ha establecido desde hace mucho tiempo un sentimiento inmoral de justificación de la corrupción. La aceptación sociológica de un vicio endémico. Y esto va por todos nosotros. Aquí quien conseguía engañar a Hacienda y arañarle 300 euros en la declaración era un pillo a envidiar, imitar y felicitar. En lugar de ser repudiado, rechazado y denunciado, pues esos 300 euros nos los estaba robando a todos. Cuando ese vicio de pensar que todo el mundo lo hace y que el dinero público no es de nadie lo practican los políticos, ya no son 300 euros. Es mucho más. Y luego nos dicen que no hay para invertirlo. Que hay que cerrar hospitales, que la solución es privatizar, es decir, volver a pagar. Que hay que inyectar dinero en los bancos y que la culpa es nuestra porque hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. La situación se nos ha ido de las manos. España está muy malita. Está podrida. Desde la Casa Real, hasta la última Diputación. Los medios de comunicación tenemos una responsabilidad histórica en esta lucha. Y no ayuda ver a algunas cabeceras escondiendo escándalos o destacándolos en función de qué partido sea el chorizo. Esta lucha no va de eso. Nos la estamos jugando todos. Hay que publicar sus caras, sus coches, sus áticos... Tienen que acabar humillados como Lance Amstrong ante Oprah Winfrey. Duele ver a tanto ladrón escondiéndose en la presunción de inocencia para no dar explicaciones. No han sido todos, defenderán todavía algunos. A estas alturas uno piensa que quien no ha metido la mano en la caja es o porque no llegaba o porque no le invitaban a la fiesta.

Fotografía de Alejandro Requeijo

Alejandro Requeijo

Licenciado en Periodismo

Escribo en LaSemana.es desde 2003

Redactor de El Español

Especialista en Seguridad y Terrorismo

He trabajado en Europa Press, EFE y Somos Radio