Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

ANÁLISIS DE ESPAÑA

El día de la marmota

Fotografía

Por Alejandro RequeijoTiempo de lectura2 min
España04-06-2012

Lo peor del último comunicado del Colectivo de Presos de ETA es que su mensaje es el mismo que hace 20 años. Por mucho que los días previos la izquierda abertzale alimentase las expectativas vaticinando un "paso histórico". El EPPK Habla de un "sufrimiento múltiple" en el que se incluyen como víctimas, rechazan la reinserción e insisten en la "amnistía", una exigencia que ya hasta su entorno ha descartado por irreal. Tan irreal como el supuesto debate que se ha producido en las cárceles. No ha sido tal. No han participado todos, ni siquiera una mayoría representativa. Las supuestas conclusiones del supuesto debate no son más que la expresión de la voluntad de ETA en su cansino intento de marcar paquete ante Batasuna en el único frente que aún controla, el de las prisiones. Nada ha cambiado por tanto. Vayamos a los textos. Durante el último año en el que tantas cosas han pasado el EPPK ha estado especialmente activo en comunicados. En noviembre, a pocos días de las elecciones, exigían "acabar con la política de castigo de modo urgente y sin ninguna condición". Ya entonces respaldaban la decisión del cese definitivo de la violencia. Así que eso tampoco es nuevo. Un mes después, en diciembre, pedían otra vez "la inmediata liberación de todos" sin ofrecer nada a cambio. En enero lo mismo: "amnistía" y nada de salidas individuales. En abril eligieron nuevos representantes, la mayoría ex dirigentes históricos que en su primera entrevista exigían una "amnistía integral". En todos estos meses nada ha cambiado salvo una cosa. El Gobierno o el Ministerio del Interior (aún nadie sabe bien quién) se sacó de la manga un Plan Integral de Reinserción para etarras que prevé acercamientos sin la necesidad de pedir perdón. Una hoja de ruta sobre la que maniobrar con los presos mucho más cómoda que la Ley. El objetivo és dividir el colectivo para debilitar a ETA, pero el camino para acabar con la banda son las detenciones. Si tan débil está la banda, ¿para qué estas maniobras? Los presos le han demostrado que aquello fue prematuro, innecesario e inmerecido. Ya han estigmatizado ese plan como antes hicieron con la fracasada 'Vía Nanclares'. Haría bien el Gobierno en analizar los pronunciamientos de ETA y sus reclusos antes de dar nuevos pasos en falso.

Fotografía de Alejandro Requeijo

Alejandro Requeijo

Licenciado en Periodismo

Escribo en LaSemana.es desde 2003

Redactor de El Español

Especialista en Seguridad y Terrorismo

He trabajado en Europa Press, EFE y Somos Radio