JUSTICIA
La Corte Penal Internacional entra en vigor tras su ratificación mayoritaria
Por Cristina Guerrero1 min
Internacional12-04-2002
Con 56 años de retraso respecto al Tribunal de Nuremberg (Alemania), 66 ratificaciones más desde el Tratado de Roma hacen posible crear lo que no hace mucho tiempo parecía una utopía.
La Corte Penal Internacional (CPI) nace de la simbiosis entre la población civil, los estados afines, Naciones Unidas y los tribunales ad hoc, a pesar de contar con el rechazo de EE.UU., Rusia y China. El secretario general de la ONU, Kofi Annan, calificó esta fusión de “nueva diplomacia” y añadió que “éste era el eslabón que faltaba dentro de la jurisdicción internacional”. El nuevo organismo tendrá la función de luchar contra la impunidad, juzgar a los individuos acusados de lesa humanidad, crímenes de guerra, de genocidio o agresión. La CPI estará formada por la mayor red de organizaciones y expertos legales de todo el mundo. Es necesario, añadía Kofi Annan, que este tratado sea firmado por más países para que no parezca ser una coalición de Occidente. De esta forma, la Corte podrá tener a un representante de cada país y asegurar el respeto a las diferentes religiones y culturas. Los representantes políticos agradecieron y dieron la enhorabuena a Kofi Annan mientras que la Administración del presidente estadounidense, George W. Bush, no acepta la CPI al afirmar que supone una amenaza a su política contra el terrorismo. En la Presidencia de Bill Clinton, EE.UU. firmó el Tratado de Roma pero Bush no ha ratificado la firma e incluso podría estar pensando borrarla. De la misma forma, Rusia y China ven una amenaza en la Corte Penal Internacional, que podría juzgar en su banquillo a miembros de sus ejércitos o de las cortes. La CPI, que entrará en funcionamiento el 1 de julio del 2002, no podrá juzgar a nadie que haya cometido delitos anteriores a esta fecha. Para cubrir este hueco siguen en marcha los tribunales ad hoc creados por la ONU.