ACHIQUE DE ESPACIOS
¡Vivan las semifinales!
Por Nacho García Barco
2 min
Deportes14-04-2002
Old Trafford, donde seis meses antes, curiosamente, habían nacido sus sueños europeos, el Dépor se bajó definitivamente de ese tren expresso que marcha vertiginoso hacia la gloria de Glasgow. Allí, anclado en el mítico Teatro de los Sueños, Irureta sacó la bandera blanca y se rindió ante el Manchester. Muchos kilómetros al sur de Europa, a la misma hora, el centenario Real Madrid expulsaba de la lujosa competición continental, a base de bofetadas de buen fútbol, al último campeón, el Bayern de Múnich. Así, lejanos en el espacio pero unidos en el pensamiento, españoles e ingleses pusieron el pasado miércoles la primera piedra del juego que se cimentará el próximo 15 de mayo en Hampden Park. Allí al fondo, en la primavera escocesa de Glasgow se le vislumbran ya los colores rojo y blanco del United y del Real. Dos leyendas frente a frente. Talento, calidad, velocidad, desborde, gol, historia, fútbol. Manchester y Real Madrid: es la final soñada. Pero antes hay algo a lo que todavía nadie se ha hecho la idea. Todo un Real Madrid-Barcelona en semifinales de la Liga de Campeones. Uno de los duelos más grandes del planeta futbolístico con el pase a la final como premio. ¿Alguien puede dar más? De nuevo, Europa mira hacia España con ojos de admiración y sorpresa. Seguro que la final volverá a hablar español, por cuarta vez en los últimos cinco años. El factor campo se carga de peso a estas alturas, por eso parten con cierta ventaja Real Madrid y Manchester. Los blancos andan un par de escalones por encima del cuadro azulgrana. En cuanto a mentalidad, a organización sobre el campo, en cuanto a fútbol e ideas... Son más claras las de Del Bosque que las de Rexach. Por eso, y por el aura que rodea a los blancos cuando suena el himno de la Champions, parten como favoritos. Por el otro lado, muy poco separa a Leverkusen y a Manchester. Los alemanes bordan el juego a día de hoy. Lo tienen todo, desde la seguridad atrás de Lucio, la velocidad de Zé Roberto, el talento de Ballack y el gol de Kirsten y Brdaric. Pero llegados a este momento, a estas alturas de la temporada, el peso de la historia también tiene un papel en esta película: y nadie más sabe de historia que Real Madrid y Manchester. ¡Vivan las semifinales!
