Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

ANÁLISIS DE INTERNACIONAL

Una buena noticia que debe ser más que un gesto

Fotografía

Por Isaac Á. CalvoTiempo de lectura2 min
Internacional11-07-2010

Llegan buenas noticias desde Cuba. Los 52 presos políticos del Grupo de los 75 que aún estaban en la cárcel van a recuperar la libertad que les fue arrebatada por el régimen castrista en el año 2003. De éstos, un reducido grupo será liberado inmediatamente y podrá salir del país; el resto de disidentes tendrá que esperar un proceso gradual que durará algunas semanas. Esta medida es fruto de la mediación de la Iglesia católica cubana (una lección más para los que critican todo lo que hace la Iglesia) y del ministro de Asuntos Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos. Ambos actores, desde sus diferentes posiciones, llevan años comprometidos por un objetivo común y su trabajo tenaz empieza a dar sus frutos. Sin duda, la excarcelación de este elevado número de opositores es una buena noticia para los disidentes, pero también lo es para el Gobierno de Cuba, que espera ser visto con más benevolencia por la Unión Europea. De hecho, Fidel Castro, que llevaba años en un segundo plano desde que cedió el poder a su hermano Raúl, volvió a dejarse ver en público. La liberación de estas 52 personas debe ser el punto de partida para terminar con la figura de los presos políticos y para iniciar un proceso de democratización y de respeto a los derechos humanos por parte de las autoridades cubanas. De poco sirve lo ocurrido si se queda en un gesto y lo que se avanza en este ámbito se retrocede en otros. Sin duda, la democratización y la apertura de Cuba no es una misión sencilla porque los hermanos Castro llevan décadas dominando y controlando a su antojo todo lo que ocurre en la isla. Por eso, es necesario empezar las reformas cuanto antes y hacerlo de forma paulatina pero constante. Así hay muchas más posibilidades de acabar con uno de los anacronismos del siglo XXI y con el sufrimiento de millones de personas.

Fotografía de Isaac Á. Calvo

Isaac Á. Calvo

Licenciado en Periodismo

Máster en Relaciones Internacionales y Comunicación

Editor del Grupo AGD