ANÁLISIS DE SOCIEDAD
El mensaje de la Cruz
Por Almudena Hernández
2 min
Sociedad06-12-2009
Pensándolo bien chirría, cuanto menos, que una habitación esté presidida por una cruz de la que cuelga, clavado, un hombre que ha sido maltratado hasta la muerte. Es la imagen de un cuerpo ensangrentado, inerte, que ha sufrido. Comparándola, evidentemente, llama mucho más la atención esa imagen que la bucólica estampa de un niño regordete recién nacido postrado en un pesebre junto a animales de granja ya adorado por humildes pastores y engalanados monarcas. Aunque también hay a quien le molesta. Pues bien, tanto o más debería escandalizar el mensaje que el mismo sujeto que ambas escenas representan con una diferencia de 30 años. Por algo será que el tal Jesús de Nazaret sigue siendo polémico 20 siglos después de su nacimiento en un pesebre y de su muerte en la cruz. Algún porqué habrá que remueva las conciencias en que ambas cosas transmiten un único mensaje: que el amor nos hace más seres humanos, nos engrandece y nos salva. Lo que no saben quienes quieren descolgar las cruces y, en menor medida, desmontar los belenes es que el tal Jesús de Nazaret dejó dicho que él también iba a estar representado en otras cruces: en el mendigo que pide para comer a la entrada de unos grandes almacenes; en el anciano que aguarda el final de sus días en soledad; en la mujer maltratada en su propia casa; en el inmigrante desarraigado; en el enfermo e, incluso, en el niño al que su propia madre le impide nacer. Hay quienes se han propuesto que el mensaje de la cruz no hiera sensibilidades con su estética políticamente incorrecta cuando se nos está educando para pasar sin mirar aquellas otras cruces cuya realidad, pensada en frío, desmontaría muchas listas electorales. ¿Tanto daño puede hacer un mensaje de amor? ¿O es que sorprende, chirría e irrita que el que está ahí colgado sea el mismo Dios que haya llegado a esa situación por pura entrega al hombre?
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo