CASO GÜRTEL
El PP cierra filas y Rajoy impone el silencio como estrategia de defensa
Por Martín Castro
3 min
España06-07-2009
"No va a decir nada". Con esta respuesta han despachado los asesores de Mariano Rajoy a los periodistas que buscaban una declaración, un titular o una noticia sobre el caso Gurtel. La consigna, además, se extiende a todos los miembros del partido. El silencio reinará a partir de ahora en la calle Génova, todo con el fin de proteger y apoyar a Camps hasta que haya un pronunciamiento firme por parte del juez.
Nada más conocerse el auto en el que el Tribunal Superior de la Comunidad Valenciana detectaba “indicios suficientes” para que Camps y otros altos cargos de su Gobierno pudiesen ser juzgados por un delito de cohecho la dirección del PP leyó un comunicado para mostrar su postura. El escrito -leído por Esteban González Pons, el responsable de Comunicación del PP y hombre de confianza de Camps- destacaba que la dirección del partido considera que “las acusaciones vertidas no han sido probadas” y que todos “mantienen plenamente su confianza en Camps”. Además se proclama la inocencia del presidente valenciano y se confía en que el recurso que presentará su defensa contra el auto del juez instructor, José Flors, terminará con el archivo de la causa. No obstante lo más llamativo del comunicado fue el mensaje de consumo interno que pretende evitar fisuras como las que se produjeron el mes pasado, cuando conocidos representantes del PP exigieron en público, en contra del criterio de Rajoy, la dimisión de alguno de los miembros del PP imputados en el caso. Según el escrito “ni el partido ni sus dirigentes van a entrar a comentar o a debatir” el contenido del auto judicial. La consigna de cierre de filas está clara y el partido está dispuesto a aguantar el chaparrón de ataques políticos y mediáticos. El comunicado oficial, en definitiva, ratifica la postura ya expresada por Rajoy en el mitin central de las europeas, cuando afirmó “¡Paco, estoy contigo! Estaré siempre delante, detrás, a tu lado”. Los pocos miembros del PP que se han atrevido a hablar lo han hecho para mostrar su apoyo. Desde Valencia, la alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, indicó que, puestos a investigar los regalos que se hacen a los responsables políticos, “habría que empezar por las anchoas del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero”. En el mismo sentido se pronunció el portavoz del Gobierno valenciano, Vicente Rambla, quien exigió “respeto” para la persona y la figura del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, ya que a su juicio existe contra él un “acecho y una caza y captura absolutamente fuera de lugar”. La versión de Camps María Dolores de Cospedal también ha querido sumarse al apoyo. Cospedal recordó que Francisco Camps, “siempre ha tenido una versión” sobre el caso Gürtel y ha recalcado que “hasta el momento, no se ha acreditado que esa versión no sea verdad”. Al margen del PP, el líder de CiU, Artur Mas, también destacó que Camps no debería tomar ninguna decisión hasta que no haya una sentencia que demuestre su culpabilidad en este caso. La salida en tromba del PP en apoyo a Camps contrastó con las críticas lanzadas desde las filas socialistas. María Teresa Fernández de la Vega aprovechó el silencio de Rajoy para apuntar que cada vez resulta “más difícil de justificar” el silencio del PP y “el mirar para otro lado”. El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, consideró por su parte que el de cohecho “no es un delito cualquiera”. Además, garantizó la “neutralidad” del tribunal popular que debería enjuiciar la causa.