PUNTOS DE DEBATE
El huracán electoral
Por Elías Said3 min
Opinión21-09-2008
Como si fuera un huracán de los que suelen azotar el Caribe y las costas estadounidenses, la campaña electoral de Estados Unidos avanza mientras sus principales candidatos, John McCain y Barack Obama, han tratado de aprovechar el cataclismo financiero de aquel país y las últimas declaraciones y medidas adoptadas por Hugo Chávez (Venezuela) y Evo Morales (Bolivia) con la expulsión de los embajadores estadounidense en sus respectivos países. Tras la Convención Republicana del pasado mes de agosto, la irrupción de Sarah Palin como compañera de fórmula de McCain ha dado un nuevo aire a esta candidatura. Su imagen ultraconservadora, defensora radical de los valores familiares y antiabortista, ha traído consigo que muchos vean a McCain como “menos cercano a la línea dura y a Bush”. He de reconocer que la elección de Palin ha sido una grata sorpresa para los republicanos, al hacer de la lucha por la Casa Blanca una de las batallas más reñidas de los últimos procesos electorales. A pesar de ello, sigo teniendo mis claras reticencias hacia McCain y su aparente “lejanía” de los planeamientos de Bush. Sus reiteradas declaraciones de permanencia del ejército estadounidense en Iraq; el reciente vídeo emitido empleando las delirantes declaraciones del presidente venezolano con el fin de exaltar el carácter patriótico de su candidatura, al contrario que la de Obama; además de las controvertidas declaraciones en las que deja entrever que mantendrá la política de alejamiento de Bush con el gobierno de Zapatero en España; por citar algunos aspectos, hacen que mantenga esta posición y que, al menos, en los temas internacionales sean cuatro años más de lo mismo, es decir, indiferencia ante América Latina, mantenimiento de la intervención militar en Oriente Próximo y diálogo con Europa comenzando con “los amigos leales” a Estados Unidos (Reino Unido, Polonia y otros con gobiernos de centro-derecha o derecha o extremadamente dependientes de los intereses estadounidenses). En cuanto a la política interna, parece claro que los ocho años de Bush no son viables ni para McCain ante la quiebra del modelo en materia económica y la ineficiencia en los asuntos sociales. En cuanto a la candidatura de Obama, el acompañamiento de Joe Biden como candidato a la Vicepresidencia ha sido irrelevante desde mi punto de vista, al asumir un rol secundario en la pugna por la Casa Blanca y dejarle a Obama el protagonismo en el contrapeso a las declaraciones de McCain y al encanto demostrado hasta ahora por Palin entre buena parte del electorado republicano e independiente. Si bien los candidatos a la Vicepresidencia nunca han sido relevantes a la hora de votar al presidente en Estados Unidos, parece que Palin ha dado un empuje a McCain, pareciendo contradecir lo irrelevante de este cargo en la psiquis de los estadounidenses. Los republicanos han empleado para estas elecciones una estrategia que hasta ahora parece haberles dado resultado, hacer de “poli mala y ultra conservadora” a Palin, mientras que McCain ejerce de “poli bueno y alejado de Bush”; mientras que los demócratas presentan esta dicotomía en un solo personaje (Obama), lo cual es algo que deberán trabajar rápido por subsanar si quieren ganar la Casa Blanca y romper con ello la errada visión que creo que muchos tienen: ver a McCain como alguien alejado de Bush cuando en realidad no lo es.