SOLUCIONES ECONÓMICAS
El BCE mantiene el precio oficial del dinero en el cuatro por ciento
Por Carlos F. Aparicio1 min
Economía13-04-2008
El Consejo del Banco Central Europeo (BCE), liderado por el francés Jean Claude Trichet, ha decidido mantener los tipos de interés en un cuatro por ciento, nivel que permanece estable desde junio de 2007 a pesar de la actual crisis económica. El presidente explicó que esta decisión tiene como objeto garantizar la estabilidad de los precios a largo plazo.
Además de anunciar la ausencia de movimiento de los precios, el presidente de la institución monetaria advirtió de la existencia de presiones inflacionistas “muy fuertes”, por lo que la situación continúa anclada en el mismo sitio desde hace ya seis meses. Trichet ha asegurado que la política monetaria sigue siendo “acomodaticia”, tal y como hizo el pasado mes de enero, y resaltó que sigue siendo necesaria “una fuerte vigilancia” por parte del BCE para que no se presenten riesgos para la estabilidad de precios a medio plazo. Las reacciones no tardaron en aparecer. El Fondo Monetario Internacional (FMI) aplaudió esta medida considerándola como “muy buena” para tratar de solventar la crisis financiera. Mientras, los analistas reaccionaron apostando por bajadas en mayo. En concreto, el analista de Caja Madrid Juan Antonio Cabrera, para quien, bajo su punto de vista, “el BCE comenzará a aplicar recortes a partir del próximo mes de mayo”. Cabrera manifestó que dichos recortes “no serán muy consecutivos”. Si en el banco presidido por Trichet, a pesar, de la opinión de los analistas, no se esperan cambios a corto plazo, la situación del Banco de Inglaterra es bien distinta. Los expertos prevén que el banco reducirá los tipos de interés hasta el cinco por ciento, debido en gran parte al debilitamiento de la libra. De confirmarse esta situación, la libra vería su tercer recorte en apenas tres meses. A pesar de este período de crisis, el presidente Trichet reiteró que la institución permanece “constantemente alerta y lista” para cumplir su mandato de garantizar la estabilidad de precios y evitar la materialización de efectos de segunda ronda.