ORIENTE PRÓXIMO
La situación en Oriente Próximo evidencia las divisiones internas israelíes y palestinas
Por Txema García
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Internacional09-12-2001
La última crisis en Oriente Próximo, provocada por la peor ofensiva terrorista palestina desde los años 1996 y 1997, que dejó en tan sólo 12 horas 26 víctimas mortales y más de 200 heridos, ha sacado a la luz las desavenencias y divisiones en el seno del Gobierno israelí y en la ANP.
El Gobierno de Unidad Nacional del primer ministro israelí, Ariel Sharon, estuvo a punto de desmoronarse la semana pasada a causa de su respuesta militar que puso en el punto de mira al líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat. Los ministros laboristas del Gabinete de Sharon abandonaron indignados el pasado martes la sala donde se preparaba la resolución en la que se declaró a la ANP una "entidad que protege el terrorismo". El líder de los laboristas, Simón Peres, ministro de Exteriores y principal voz en las negociaciones sobre el proceso de paz consiguió apaciguar los ánimos tras la amenaza de los ministros de su partido de abandonar el Gobierno. Los laboristas temen que Sharon haya decidido eliminar de la escena política al presidente palestino, lo que dejaría sin sentido el papel negociador de Peres. En el lado palestino las cosas no fueron mucho mejor y el papel de Arafat como líder ha quedado muy tocado en esta crisis. El grupo terrorista Hamás dio orden a sus militantes y simpatizantes de iniciar una campaña de desobediencia civil contra la ANP como protesta por la oleada de detenciones practicadas. Entre ellas, el arresto domiciliario del líder espiritual de la organización, el anciano jeque Ahmed Yasín. Abdelaziz Rantisi, líder político de Hamás y en orden de busca y captura, hizo el llamamiento en la clandestinidad. La gravedad de la situación la ilustra el hecho de que sea la primera vez desde que se fundara Hamás, en 1988, que los fundamentalistas se enfrentan de manera abierta al presidente palestino. Otro grupo extremista como Yihad Islámica también amenazó a Arafat con dirigir sus atentados contra la ANP. "No dudaremos en usar nuestras armas contra el que intente bloquear o impedir nuestra lucha contra el enemigo sionista", según informó France Presse.