MEDIO AMBIENTE
Las intensas lluvias causan innumerables daños en varias comunidades
Por Cristina Arias
2 min
Sociedad23-05-2007
Las intensas lluvias y las repetidas tormentas, que han afectado a varias zonas de la Península durante los últimos días, han dejado muchas consecuencias a su paso: complicaciones en las comunicaciones por tren, carreteras cortadas, desalojos obligatorios de vecinos en varias localidades y daños en miles de hectáreas de cultivo.
Las trombas de agua y el granizo afectaron principalmente a las comunidades de Castilla y León, Madrid, Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía, Comunidad Valenciana y Murcia y han sido especialmente intensas en las provincias de Jaén, Ciudad Real, Albacete, Toledo, Madrid, Ávila y Segovia. Sin embargo, el suceso más grave se registró la noche del martes 22 de mayo en la localidad pontevedresa de Cotobade, donde un hombre murió sepultado por un muro que se desprendió con el agua. Pero, en general, de las zonas más afectadas por las tormentas, Castilla La Mancha fue la peor parada. Las inundaciones provocaron cortes completos en las comunicaciones por tren entre el centro y la zona levantina, con cientos de pasajeros perjudicados que fueron evacuados. Además, el servicio ferroviario resultó interrumpido entre Madrid y las zonas orientales de Valencia y Murcia. Las carreteras también sufrieron las consecuencias y muchas permanecieron varios días cerradas al tráfico. En lo que respecta a la agricultura se calcula que hay afectadas hasta 136.000 hectáreas de viñedo y 385.000 de cultivo en Castilla-La Mancha (según la Asociación de agricultores ASAJA, estas hectáreas arrasadas tienen unas pérdidas que ascienden a más de 160 millones de euros). En Castilla y León, también muy afectada, han quedado arrasadas hasta 14.000 hectáreas de maíz, remolacha y cereales en Zamora, así como 3.000 de regadío y hasta 4.000 de vino en Toro y 3.500 de viñedo en Burgos, a parte de los daños producidos en Valladolid y Ávila. En Extremadura la cosecha de cereza temprana del Valle del Jerte se podría haber perdido y en Badajoz, de las 130 hectáreas de superficie con daños, la mayor parte corresponden a frutales de regadío como el melocotón, el peral y el ciruelo. En Andalucía las fuertes lluvias han afectado al olivar y a las huertas de hortaliza. Las lluvias, además, obligaron a evacuar a centenares de personas y causaron innumerables daños en infraestructura urbana. Ahora, después de la tormenta se espera que llegue la calma.