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INMIGRACIÓN

El aumento de la población extranjera urge políticas de integración

Por Leticia PradoTiempo de lectura2 min
Sociedad25-05-2007

España se ha convertido en un país receptor de inmigrantes. Todas las semanas llegan a las costas nacionales centenares de inmigrantes que vienen con la intención de quedarse. Pero los aeropuertos son las principales puertas de entrada de los extranjeros. Para lograr la integración de todos ellos, se están desarrollando nuevas medidas de inmigración.

El Gobierno está llevando a cabo políticas de regularización de inmigrantes pero, aún así, el número de los ilegales en el territorio nacional asciende a más de un millón y la cifra continúa en aumento, con lo que también crecen las necesidades de políticas que den respuesta. Un informe de la Fundación Europea para la mejora de las Condiciones de Vida y Trabajo revela que el 90 por ciento de los inmigrantes residentes en España, pasaron por una época en la que eran ilegales. La cifra es elevada no sólo por aquellos que deciden vivir de manera ilegal, sino también porque el Gobierno ha optado por convertir a los inmigrantes legales que no han renovado sus permisos de residencia antes del vencimiento del plazo en ilegales. Se estima que unos dos millones de trabajadores extranjeros están afiliados a la Seguridad Social. Entre todos ellos, ha aumentado el número de inmigrantes que, en vez de ser demandantes de empleo, crean sus propios negocios. Un caso claro es el de los chinos. Aunque muchos se empeñen en culparles del cierre de los comercios tradicionales, los estudios demuestran que esto es consecuencia de los grandes centros comerciales, de la negativa de las nuevas generaciones de hacerse con el negocio familiar o de su incapacidad de cubrir las nuevas demandas de la sociedad. Un último proyecto, en cuanto a inmigración se refiere, se prevé aprobar en 2008. Se trata de una ley por la que los nietos de inmigrantes españoles podrán obtener la nacionalidad española. Afectará sobre todo a los países de Latinoamérica, en donde ya se espera con cierto temor la demanda masiva del pasaporte. Se desconocen las repercusiones de la denominada Ley de los nietos. La realidad es que muchas personas a las que ahora sólo se les reconoce el pasaporte extranjero, pasarán a tener los mismos derechos que los españoles y los europeos.

Fotografía de Leticia Prado