INVESTIGACIÓN
El Banco Espírito Santo muestra su indignación
Por Elena de Román Martín2 min
Economía11-11-2006
Indignación es la palabra que mejor define cómo se siente el Banco Espírito Santo (BES) tras el registro de sus sedes en Madrid y Barcelona. El presidente del banco portugués, Ricardo Salgado, leyó un comunicado ante los medios lusos y españoles en la sede del banco en Lisboa, donde ha dejado clara la irritación que experimenta por el modo de actuar las autoridades judiciales, aunque ha asegurado que no interpondrá una demanda.
Salgado ha calificado de “espectáculo mediático” la intervención de agentes en las oficinas de Madrid y Barcelona, y ha añadido que éste no es el modo de operar con los bancos españoles. El presidente del BES ha negado que su banco haya cometido ilegalidades y ha pedido que se restaure el daño que la compañía ha sufrido como consecuencia de lo ocurrido, aunque la entidad no ha podido aún cuantificar los daños y perjuicios. Espírito Santo espera que, en el menor tiempo posible, se efectúen de forma pública las aclaraciones con el objetivo de reparar el daño causado al nombre de la entidad. El presidente del banco luso también ha aclarado que, de las cuentas bloqueadas en España por un importe de 5.542.588 euros, sólo tres tienen como titular a una de las entidades sometidas a investigación judicial, con un saldo total de 3.370.930 euros. Sobre las cuentas bloqueadas en Madeira, ha insistido en que “no es un paraíso fiscal, sino zona franca, y que allí han sido bloqueadas cuentas de ocho clientes, por un valor total de 7,2 millones de euros”. El importe conjunto de los saldos inmovilizados en España y Madeira totalizan 7.248.271 euros. Esto supone un 0,4 por ciento de los 1.800 millones que las autoridades españolas afirman haber bloqueado en esta investigación. El directivo, además, ha reiterado que las cuentas fueron creadas en Madeira de acuerdo con el régimen legal vigente en Portugal. Lo que más ha sorprendido a Salgado es que no se haya divulgado “el paradero de los restantes 1.792 millones de euros, es decir, el 99,6 por ciento del total inmovilizado”. Según el presidente del BES, el dinero que busca Garzón está “en otros bancos, aunque nadie sabe cuáles son”. Asimismo, Salgado ha afirmado que “la supuesta operación de inversión de 500 millones de euros en que se fundó la investigación nunca se concretó, por lo que las pesquisas en curso, basadas en un equívoco, son, por eso mismo, inadecuadas”, por lo que considera que la sospecha que dio origen a la operación no tiene “fundamento”.