DEBATE AUTONÓMICO
Opiniones para todos los gustos y una ausencia, la de Ibarretxe
Por Laura Ferrera 
3 min
España12-11-2005
Los tres días de intenso debate en el Senado han sido el reflejo de la política española, opiniones enfrentadas y pocos acuerdos. El Senado se llenó hasta la bandera para escuchar lo que tenían que decir los distintos presidentes de las comunidades autónomas.
El primero en hablar fue el presidente de Cataluña, Pascual Maragall. Este se mostró orgulloso de lo que estaba consiguiendo con el Estatuto Catalán y dio su apoyo a Zapatero por su “coraje político”. Según Maragall, el Gobierno ha puesto las bases para “un salto cualitativo extraordinario”en el clima de diálogo y entendimiento entre los pueblos de España”. Por su parte asume la responsabilidad de explicar el texto que propone tantas veces como sea preciso. En cuanto a la financiación desea alcanzar un reparto porcentual 30-40-30, Administración del Estado, Autonomías y Ayuntamiento en lugar de actual de 30-50-20. Su intervención se pude resumir con su frase “Hoy la España plural está mas próxima y es más posible”. Manuel Chaves, destacó como tema importante en su discurso el problema de la inmigración y reclamó más ayudas a las comunidades, que como Andalucía, soportan un peso mayor en este sentido. También aprovechó su intervención para recordar la necesidad de un acuerdo sobre la conocida como “deuda histórica “que negocia con la Administración Central. Chaves habló de un nuevo impulso autonómico y del perfeccionamiento y la actualización del modelo en tres sentidos fundamentales: fortalecimiento de la autonomía financiera, garantía del principio de igualdad y multilateralidad en la definición del modelo. Al igual que Chaves, el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, abogó por la multilateralidad y se mostró en contra de regular un sistema de financiación económica cerrado. Touriño se expresó en gallego y dijo que Galicia aspira a desempeñar un papel decisivo en la redefinición del modelo territorial. Defiende una acomodación pacífica de varias identidades nacionales dentro de un mismo Estado. Su lema es “más autogobierno y más solidaridad”. Otras comunidades como La Rioja piden también más solidaridad pero desde el punto de vista de la no discriminación. Reclaman el mismo grado de autogobierno para todos. Por su parte el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps que inició su discurso en valenciano pone su estatuto como ejemplo de constitucionalidad y de consenso. Además de la ausencia de Ibarretxe, justificada por la no aceptación se su plan, Ibarra tampoco pudo acudir al Senado por motivos muy distintos. Sufrió un infarto y se encontraba recuperándose en el hospital, en su lugar acudió el Vicepresidente de Extremadura, Ignacio Sánchez Amor. Este leyó un discurso que Ibarra había redactado en primera persona y en el que se sigue mostrando como una voz discordante dentro del PSOE. Ibarra considera que el sistema autonómico puede ser mejorado y ampliado pero se opone al debilitamiento de España a costa de favorecer las autonomías. El punto de humor del debate lo puso el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, con su ya clásico leguaje. En su exposición defendió los cambios siempre que se realicen dentro de la Constitución. Pero en un momento del discurso se le cayeron todos los papeles al suelo por lo que tuvo que bajar de la tribuna para ir a recogerlos. Esto provoco la carcajada en todo el hemiciclo y también en el propio Revilla.