El Sevilla pone pie y medio en cuartos

Por Zarek Boda2 min

El Sevilla ha presentado sus credenciales para estar en los cuartos de final de la Liga de Campeones. A pesar de que su condición de favorito le convirtiera en un rival peligroso, el CSKA, equipo inmerso en la pretemporada, le ha dado más de un susto al conjunto español. Con el frío como invitado de lujo, los hombres de Manolo Jiménez se encontraron con el juego que más les favorecía. La circulación del balón no era demasiado buena debido a las condiciones del terreno de juego, pero los sevillanos dominaban en el medio campo. Algo que tampoco parecía preocupar a los moscovitas, ya que sus principales armas se encuentran en el contraataque. Cuando parecía que los locales podían dar la sorpresa, el Sevilla cortó de raíz todas sus aspiraciones. El incombustible Jesús Navas se internó por la banda, y tras un gran centro al corazón del área, Álvaro Negredo solo tuvo que empujar el balón a la red. El gol plasmaba la superioridad de los andaluces en el campo, pero el CSKA no se rindió tan fácilmente. El delantero japonés, Keisuke Honda, fue el mayor peligro para la zaga sevillista, ya que suyas fueran las mejoras ocasiones de los rusos. En los últimos minutos del primer tiempo, los locales fueron en busca del empate, pero Andrés Palop desbarató cualquier jugada de peligro. El paso por los vestuarios le sentó muy mal al equipo de Jiménez, ya que el frío y el cansancio afectaron a los jugadores nada más comenzar la segunda mitad. El conjunto hispalense se fue apagando poco a poco, mientras que Honda seguía inquietando la portería defendida por Palop. El técnico sevillista movió ficha, e introdujo en el campo a Diego Perotti, que aportaría al equipo la frescura necesaria para mantener el resultado. Sin embargo, no se esperaba el tremendo gol de un ex de la Liga española, Mark González. El jugador chileno se sacó un tremendo disparo desde casi 30 metros, que sorprendió por completo a Palop. El gol pareció subir el ánimo de los moscovitas, que a punto estuvieron de marcar el segundo sino llega a ser por la actuación del portero valenciano. El Sevilla pareció reaccionar, y volvió a hacerse con el dominio del esférico. La recta final del partido estuvo marcada por la escasez de ocasiones por parte de ambos equipos, que no se atrevieron a buscar el tanto de la victoria. Con este empate, el conjunto sevillano jugará con mayor comodidad el partido de vuelta en casa, aunque no se debe fiar de un CSKA que le ha plantado cara durante buena parte del encuentro.