Invencibles

Por Miryam Briz1 min

No hay rival que se le resista al Barcelona en la Liga de Campeones, al menos de momento. Esta vez la víctima fue el Galatasaray, que quedó eliminado en un partido en el que los suplentes volvieron a ser no sólo los goleadores, sino también los protagonistas. Los turcos se plantearon el partido desde la pasividad, lo que dio al encuentro una tranquilidad inicial que Dani y Geovanni se encargaron de alborotar. Además Saviola se encargó de demostrarle a su técnico que su sitio no está en el banquillo, sino en el campo. Pero a pesar de que el Barça lo tenía fácil, algo sigue fallando en el equipo: la defensa. Puyol se hace omnipresente en cada partido, y el equipo no se debería acostumbrar, sino cambiarlo. Así que los turcos asustaban las pocas veces que se acercaban al portal del alemán Enke, e incluso pudieron ponerse por delante del marcador en más de una ocasión. Pero era de nuevo la noche de los suplentes, y Saviola hizo de las suyas en el medio campo, ayudado por Mendieta. Dani, para una oportunidad que tenía, no quiso desaprovecharla y marcó el primero. El Galatasaray, entre tanto, mantuvo todo el partido un ritmo lento, aburrido, cansino. No lucharon por evitar su eliminación, ni tan siquiera cuando Cihan logró el tanto del empate, y tan sólo el ex jugador del Madrid, el bosnio Baljic, dio algunas pinceladas debuen juego e intento colar el balón. En las gradas el ambiente era triste y tan sólo los tres tantos animaron un poco la tarde en el Camp Nou. Al final el partido concluyó como por inercia, y con la victoria, el Barcelona es el cuarto equipo de la historia capaz de sumar el pleno en una liguilla de la Champions.