Casillas y la eficiencia acaban con el Zenit

Por LaSemana.es3 min

El Real Madrid resolvió su visita al Zenit San Petersburgo con dos goles providenciales y rompió una racha de dos años sin ganar fuera de casa en competiciones europeas. El partido se le puso de cara al equipo madridista a los tres minutos, gracias a un gol en propia puerta del Zenit, pero los continuos fallos de la defensa blanca dieron vida al campeón de la UEFA y la Supercopa. Íker Casillas volvió a ser el salvador de su equipo en la segunda parte, mientras Gonzalo Higuaín, desacertado en los últimos metros, no consiguió hacer olvidar a Raúl González, que ni siquiera saltó al campo. El Real Madrid salió muy fuerte y dominó a placer los primeros quince minutos. Primero Higuaín remató espléndidamente de cabeza un centro medido de Ruud van Nistelrooy, pero el portero ruso despejó a córner con una gran estirada. Seguidamente, Rafael van der Vaart penetró por la derecha aprovechando un resbalón del defensa y centró raso al corazón del área rusa, donde el eslovaco Tomas Hubocan introdujo incomprensiblemente el balón en su portería. Dos minutos después, Van Nistelrooy pudo marcar el segundo, pero resbaló en el último momento. Rubén de la Red que era el amo del centro del campo y el Real Madrid imponía su ritmo. No obstante, la alegría duró poco y al cuarto de hora el Zenit comenzó a desperezarse, en gran parte gracias al lateral izquierdo Radek Sirl, que cogió una y otra vez la espalda a Sergio Ramos. Casillas salvó a su equipo a los 20 minutos cuando Pável Pogrebnyak estaba a punto de empatar el partido tras una gran jugada de su compañero Konstantin Zyriánov. El Zenit pasó de dominado a dominador y Andrei Arshavin, que despertó de su letargo mediada la primera parte, comenzó a hacer diabluras. Así, tras una descoordinación al tirar el fuera de juego por parte del italiano Fabio Cannavaro, Arshavin centró solo por la derecha y el portugués Danny Alves, el hombre de los 30 millones de euros, marcó el empate al rematar en el segundo palo. Cuando las cosas pintaban peor, apareció Van Nistelrooy, que aprovechó un fallo garrafal de la defensa local para batir al guardameta con un disparo ajustado al palo. A partir de ese momento, el Madrid recuperó el dominio del juego y tuvo oportunidades para sentenciar, pero Higuaín no logró marcar. Primero, tras un pase de tacón de Van der Vaart, disparó alto con la izquierda; y al final de la primera parte no llegó por poco a un centro con la derecha de Arjen Robben, que había regateado a sus dos marcadores. En la segunda parte, el Real Madrid se dedicó a dormir el partido, mientras el Zenit no conseguía acelerar el ritmo de juego y dependía de una genialidad de Arshavin. No obstante, Casillas tuvo que emplearse a fondo. Comenzó su recital despejando a córner un gran disparo raso del checo Sirl, el más activo de su equipo. El técnico local, el holandés Dick Advocaat, decidió arriesgar e introdujo a dos delanteros, lo que cambió el rumbo del partido en los últimos 20 minutos, en los que el Zenit encerró completamente al Real Madrid. Pero Casillas lo paró todo y, de esta forma, el Real Madrid suma dos victorias en sus dos partidos y refuerza su liderato en el Grupo H. El Zenit sigue pagando la novatada en su estreno y se mantiene sin puntos en su casillero, ya que perdió también en su debut en la Liga de Campeones, en Turín, frente al Juventus.