Prácticamente 'hundidos'

Por Luis Giménez2 min

El Sporting de Gijón desaprovechó una oportunidad de oro para salir del descenso. Los de Manolo Preciado perdieron 3-1 ante el Almería, a pesar de adelantarse primero en el marcador, y se alejan de la salvación. Los andaluces bordaron su papel tanto en ataque como en defensa, con lo que demostraron por qué el año que viene jugaran en Primera. La delicada situación de los asturianos hizo que saltaran al terreno de juego lanzados a por el triunfo. Mentalidad que les duró sólo durante los primeros minutos, pero fue suficiente para ponerse por delante en el luminoso gracias al tanto con la testa de Carmelo González. Los locales no estaban dispuestos a ceder ni un metro más y, tras este jarro de agua fría, se hicieron con las riendas de juego. Cuando todavía no se había cumplido la media hora de juego Miguel Ángel Nieto recogió un rechace dentro del área para clavar el cuero en la escuadra y poner las tablas en el partido. Los de Gijón vieron en este gol su sentencia hacia la Segunda División, ya que a partir de aquí no mostraron interés alguno en la victoria. El conjunto de Hugo Sánchez manejaba el encuentro a su gusto, pero no lograban traspasar la línea de tres cuartos, por lo que apenas creaba peligro alguno para la portería de Iván Cuéllar. El paso por los vestuarios sirvió para arreglar el problema ofensivo que estaban teniendo los almerienses, pues con la reanudación del partido llegaría el 2-1. Kalu Uche recibió un pase entre líneas y no falló en el uno contra uno ante el cancerbero rival. Este tanto tampoco logró despertar a los visitantes, que veían cómo según avanzaban las cosas se les complicaba el encuentro y aún más la permanencia. El Almería movía el balón de un lado para otro y se plantaba con gran facilidad en el área defendido por el Pichu Cuéllar, pero sus delanteros parecían tener la pólvora mojada y no conseguían poner la guinda al pastel. Ya con el tiempo cumplido, y tras un veloz contragolpe, Álvaro Negredo sirvió en bandeja el cuero a Pablo Piatti para que empujara el balón al fondo de la red y culminar así la remontada. Tres puntos más que dan la tranquilidad a los almerienses de permanecer un año más en la máxima competición. Sin embargo, el Sporting no pudo aprovecharse de los pinchazos de sus rivales y cae en el descenso, a dos puntos de la salvación.