El Tenerife se reencuentra con
el triunfo en primera

Por Luis Gimenez2 min

El Tenerife jugó en casa su primer partido en la máxima competición, después de 7 años de infierno en las divisiones inferiores. Ningún santacrucero se quería perder este encuentro, y el Heliodoro Rodríguez López estaba a rebosar de eufóricos seguidores. Los jugadores, no defraudaron a su público y se impusieron por 2-1 ante el Osasuna, que sigue sin saber lo que es ganar en este campo. Los locales, supieron aprovechar muy bien su ventaja numérica por las expulsiones de Nacho Monreal y Javad Neukoman.Los navarros empezaron mandando en el partido, e incluso pudieron adelantarse en el marcador en varias ocasiones. Los locales no se encontraban sobre el terreno de juego, y se veían arrollados por una marea rojilla. Media hora les costó a los isleños despertar, y empezar a plantar cara a sus rivales. Alejandro Alfaro estuvo a punto de romper la igualada, pero su disparo sobre la línea de cal se marchó incomprensiblemente por encima del larguero. Los pupilos de Jose Antonio Cmacho no se achicaron y contestaron con un cabezazo de Nekuman, que tuvo que despejar Sergio Aragoneses con la punta de los dedos. El paso por los vestuarios, y la charla con los entrenadores, sentó muy bien en ambos equipos, que saltaron al terreno de juego con las cosas muy claras. Así fue que antes de que los espectadores regresaran a sus asientos, Juan Francisco Nino ponía a su equipo por delante. Ricardo León puso un centro perfecto, para que el delantero enganchara una potente volea que se colaría en el fondo de la red. Las cosas se les complicaban aún más al Osasuna, ya que en la siguiente jugada, Monreal iba a ser expulsado. Pero las adversidades no tumbaron a los de Pamplona, que se rehicieron sin problemas para volver a poner el empate en el luminoso. Walter Pandiani cabeceó un córner botado por Pachi Puñal, al que nada pudo hacer Aragoneses. La locura reinaba sobre el terreno de juego, como si fuese el tiempo de descuento, con un juego de ida y vuelta, que premió la insistencia local. Ricardo León enganchó un zapatazo desde fuera del área para batir a su tocayo, y devolver así la ventaja a su equipo. Los visitantes, que perdieron otro jugador por roja directa, se vieron impotentes ante la situación y bajaron los brazos, poniéndoselo muy fácil a los de Jose Luis Oltra.El Tenerife sumó así sus primeros tres puntos de la temporada, que les sitúan en la zona media, dejando un buen sabor de boca para su afición.