El Málaga contiene la reacción navarra

Por LaSemana.es2 min

El Málaga logró contener a Osasuna en el tramo final de partido y evitar que los navarros, tras remontar un 2-0 en contra, se fueran con algún punto de La Rosaleda. Dos goles en los últimos minutos dieron al conjunto boquerón un triunfo con el que se sitúa en la zona media alta de la tabla. Mientras, el conjunto navarro frena su recuperación iniciada la pasada jornada y se mantiene como penúltimo de la clasificación. El partido empezó muy frío, aunque el Málaga tuvo más el balón y Osasuna, bien situado, se defendió perfectamente. Un cuarto de hora tardó el equipo pamplonés en llegar a la portería del Málaga y fue el centrocampista checo Jaroslav Plasil el que se encontró con la intervención del meta Iñaki Goitia. Dos minutos después, un lanzamiento del delantero franco-marroquí Nabil Baha lo repelió el poste, en lo que fue la jugada del despertar del Málaga, porque el Osasuna dio muestras de superioridad. El equipo de Antonio Tapia, pese a todo, se acercó escasamente al área contraria, pero cuando lo hacía el gol estaba cerca ante un rival bien plantado. El enfrentamiento no mejoró en los inicios de la segunda parte, pese a que el Málaga lo intentó, aunque se encontró con un equipo, el dirigido por José Antonio Camacho que aguantó la igualada sin excesivo problema. En ésas, un balón perdido dentro del área grande visitante, tras un despeje de un jugador osasunista le vino franco al defensa Javier Calleja y, cuando iba a lanzar, Juanfran Torres le trabó, por lo que el colegiado Rodríguez Santiago señaló penalti. El centrocampista de la cantera Antonio Galdeano, Apoño, encargó de materializar el primer tanto del partido y entonces todo cambió. El Osasuna se abrió y el Málaga, en una jugada por la izquierda magnífica entre Javier Calleja y Adrián López, consiguió el 2-0 con un remate de cabeza de Baha. El Málaga, entonces, se encerró atrás, quizás más por el cansancio que por el empuje de Osasuna, y el equipo navarro se aprovechó de ello, ya que en dos remates de cabeza, primero de Javad Nekouman y posteriormente de Miguel Flaño, igualó inesperadamente el marcador. Faltaban nueve minutos para la conclusión y, cuando nadie esperaba la resurrección del Málaga, salió a relucir Albert Luque, quién con un lanzamiento desde fuera del área y escorado a la derecha tocó en un contrario y descolocó a Ricardo para poner el 3-2. La sentencia llegó en el tiempo de prolongación, con una jugada a la contra muy rápida entre Luque y Eliseu Pereira, que por velocidad se llevó el balón y por bajo batió a Ricardo López.