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SUICIDIO

El etarra Gil Ostoaga, uno de los últimos casos

Por Cristóbal CabezasTiempo de lectura1 min
España29-12-2002

La Ertzaintza localizó en Legazpia (Guipúzcoa) el cuerpo sin vida del etarra Félix Ramón Gil Ostoaga, recientemente excarcelado por la juez de Vigilancia Penitenciaria de Bilbao, Ruth Alonso. Esta decisión de concederle la libertad condicional suscitó importantes discrepancias.

El cadáver presentaba un disparo en el pecho y junto al cuerpo había una escopeta. Diversos medios apuntaron que el arma que se encontró junto al cuerpo era propiedad del hermano del ETARRA, lo que hizo esbozar la posibilidad de que Gil Ostoaga se hubiera suicidado. El informe preliminar de la autopsia practicada a Gil Ostoaga avaló la hipótesis del suicidio, según informaron fuentes próximas a la investigación. Dichas fuentes explicaron que, según los datos forenses, Gil Ostoaga recibió el disparo "directamente" en el corazón, lo que le produjo un rigor mortis inmediato, que hizo que incluso uno de sus dedos quedara doblado en posición de disparo. Sobre la una de la madrugada del pasado 23 de noviembre una persona llamó por teléfono a la Policía Autónoma para comunicar el hallazgo de un cadáver en un paraje cercano al barrio de Urtatza, en el municipio guipuzcoano de Legazpia. Una patrulla se dirigió al lugar y encontró el cuerpo, ya frío, en un claro de un bosque próximo al camino de acceso al citado barrio junto a unos troncos apilados. Tras las primeras investigaciones, la Ertzaintza averiguó la identidad de esta persona. Se trataba de Félix Ramón Gil Ostoaga, miembro de ETA condenado a cerca de 300 años y que quedó recientemente en libertad condicional por decisión de la juez de Vigilancia Penitencia de Bilbao, Ruth Alonso. Esta resolución judicial originó una fuerte polémica en ámbitos políticos y jurídicos, que se zanjó cuando el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) resolvió que la magistrado había actuado correctamente y conforme a la legislación vigente.