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Alarmante caída de los beneficios del SCH por las crisis brasileña y argentina

Por Rodrigo Marciel IbáñezTiempo de lectura1 min
Economía30-10-2002

Una vez más, el efecto dominó aparece en el mundo de la economía. La fuerte vinculación de los bancos españoles con Latinoamérica vuelve a provocar que la crisis en los países del otro lado del Atlántico perjudiquen también a las sucursales españolas. Esta vez le ha tocado al SCH, que ha reducido sus beneficios en un 13,6 por ciento.

Ante esta panorama, Alfredo Sáenz, consejero delegado del Santander Central Hispano (SCH), aseguró que el banco ha disminuido el riesgo con Brasil y reforzará sus recursos propios. Sáenz confirmó que este año el SCH ganará 2.250 millones, un 10 por ciento menos, y que mantendrá el dividendo. Alfredo Sáenz restó importancia al asunto y afirmó que los resultados del banco hasta septiembre son “buenos” y achacó la caída de los resultados al coscorrón de los tipos de cambio y las operaciones financieras de Latinoamérica. El SCH cerró los nueve primeros meses con un beneficio atribuido de 1.721,9 millones de euros, un 13,59 por ciento menos que un año antes, consecuencia de la devaluación de las monedas locales latinoamericanas (sobre todo, el real brasileño) y de la volatilidad de los mercados, que ha lastrado el resultado por operaciones financieras. Sáenz afirma que el crecimiento del negocio comercial en Europa, sobre todo en España, proporciona 1.243 millones de beneficio, un 19,4 por ciento más. Este segmento, que es uno que ahora quiere impulsar la entidad, ha servido para contrarrestar la caída de otras divisiones como América Latina. La caída de la Bolsa ha añadido mayor dramatismo a la situación. Las participaciones industriales y financieras proporcionaron el 18 por ciento del beneficio en diciembre pasado, mientras que hasta septiembre sólo suponen el uno por ciento de lo ganado. Sin embargo, el cambio de presidente en Brasil puede hacer cambiar la situación, Así lo expresaba Sáenz: "Estamos reduciendo el riesgo en Brasil mediante la disminución de la cartera de deuda, aunque creo que la tormenta ha pasado tras la llegada del presidente Lula".