Política
Rajoy hace balance de sus dos años en el Gobierno
Por Carlos Martínez de Leyva3 min
España21-11-2013
Tras la victoria en las elecciones de 2011 Rajoy advirtió: "Estamos ante un cruce de caminos que va a determinar el futuro de nuestro país en las próximas décadas; es ahí donde se mide el temple de los hombres y los pueblos. Vamos a gobernar la situación más delicada de los últimos años". Este miércoles, a los dos años de la victoria del PP, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy ha declarado: "Quiero dar las gracias a los españoles porque sé que hay mucha gente que vive en momentos de dificultad".Y a modo de balance recuerda: "Han sido dos años muy intensos, las cosas no eran fáciles y siguen sin serlo. Pero creo que se ha trabajado bien".
Para celebrar el segundo aniversario de su victoria electoral y el ecuador de la legislatura, el presidente del Gobierno ha aceptado, rompiendo su costumbre, hablar unos segundos con los periodistas en los pasillos de la Cámara. Rajoy ha admitido que el Gobierno se ha visto "obligado" a tomar decisiones para afrontar la crisis, pero ha subrayado que "ahora ya las cosas están un poco mejor". "Los españoles pueden tener la total y absoluta certeza de que esta situación la vamos a superar", ha enfatizado en los pasillos del Congreso. Ha reconocido que las "cosas siguen sin ser fáciles" por lo que ha recalcado su voluntad de no relajarse ni conformarse con que la recuperación quede ya a la vista. El presidente del Gobierno ha manifestado que su Ejecutivo va a seguir "trabajando" y "haciendo reformas". "Creo que ya empezamos a sentar bases sólidas y España volverá a ser lo que todos queremos que sea en un plazo de tiempo no muy largo", ha aseverado. Rajoy llegó al poder con una herencia económica de 5.273.000 parados, una prima de riesgo de 460 puntos –durante el verano de 2012 llegó a superar ampliamente los 600 puntos básicos– que encarecía nuestra financiación exterior hasta límites insostenibles y la amenaza permanente de la intervención, como les había ocurrido a Grecia, a Portugal y a Irlanda. Algo a lo que Rajoy siempre se negó, a pesar de las voces, llegaban de Bruselas y de la propia oposición, que le instaban a permitir que Bruselas controlara nuestro presupuesto. La estrategia de Rajoy en estos dos primeros años se ha sustentado en tres prioridades: centrarse en la economía, evitar que su Gobierno se metiera "en líos innecesarios" y controlar la conflictividad social "sin dejar de hacer lo que tenía que hacer". Según un miembro del equipo económico "El resultado es coherente con la estrategia política de Rajoy durante estos años. Los objetivos podrían haber sido otros, pero lo que no se puede negar es que Rajoy ha llegado a la meta que se propuso". En ese área económica, aseguran que "la nave está estabilizada" y que las cosas "van a ir poco a poco a mejor". Mantienen que Rajoy va a tener margen para rectificar sus incumplimientos fiscales y para cerrar el ciclo de su primer mandato con noticias en positivo "y que lleguen directamente al bolsillo de los ciudadanos". El segundo objetivo de Rajoy, el de «no meterse en líos innecesarios», también se da por bien cumplido en medios populares. "Si el ministro más tocado, con la que ha caído, es el ministro de Educación, esto indica que Rajoy ha conseguido que la tripulación salga bastante indemne de la tormenta", explican en Moncloa. Y en cuanto al tercero de los objetivos de Rajoy, mantener la paz social, los suyos reconocen que el mérito es estrictamente suyo. De esa estrategia de evitar el conflicto, de navegar de perfil los problemas y de aguantar los tiempos hasta la desesperación de sus adversarios políticos. "El nivel de conflictividad social ha sido muy bajo para el contexto en el que nos hemos movido y las decisiones que se han adoptado. Y esto es un éxito de la forma de hacer política de Rajoy", indica uno de los ministros más veteranos. Los ministros se han acomodado a la forma de trabajar de Rajoy y las medidas más ingratas están ya, en su mayoría, puestas en marcha. El otro problema de Rajoy estos años han sido las revelaciones sobre presunta financiación irregular en el PP y sobre las cuentas de Luis Bárcenas en Suiza. Desde la publicación de los papeles de Bárcenas, supuestos extractos de una contabilidad de Bárcenas, la oposición no ha parado de exigir responsabilidades políticas.