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TOROS

ERC continúa su batalla contra la Fiesta

Por Almudena HernándezTiempo de lectura2 min
Espectáculos24-11-2004

Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) sigue dando puyazos a la Fiesta de los toros. Y algunos llegan a ser verdaderos marrones, de esos que no le gustan al aficionado por desagradables, poco certertos e inapropiados. Uno de los últimos varetazos ha sido la enmienda que ERC presentará para modificar la Ley de Protección de los Animales de Cataluña, aprobada en 2003.

Ciertos sectores políticos aprovechan tener la llave de los gobiernos democráticos para modificar las leyes a su antojo. Se aprovechan de la necesidad del Ejecutivo con el que pactaron. No se dan cuenta de que la normativa que quieren modificar afecta a un colectivo que quizás supone muchos más votos de los que dichos sectores recibieron en las urnas y que por el sistema quedan desprotegidos ante los caprichos de la clase política. La situación no sólo se produce en el orbe taurino, como es el caso. El objetivo de ERC, partido independentista catalán y socio del Gobierno Español, es prohibir la muerte de los toros durante la lidia, además del uso de las banderillas o de la pica. Posiblemente, detrás de esta propuesta, más que la defensa de los animales, ERC quiere herir de muerte a lo que se denomina Fiesta nacional, porque no entiende que Cataluña se considere dentro del concepto de nación española. Al margen de todo ello, lo que es seguro es que ERC intentará que los otros grupos del Parlamento catalán apoyen esta enmienda para restringir aún más el espectáculo taurino en esta comunidad autónoma, una vez que se ha prohibido la entrada de los menores a las plazas de toros. Este grupo político ya logró que el Ayuntamiento de Barcelona proclamase a la capital catalana ciudad antitaurina. Según Oriol Amorós, diputado de ERC, la Fiesta de los toros es un "anacronismo" de la época de Fernando VII. Lo que desconoce este político es que la Fiesta apenas se parece a aquella que se celebraba por entonces y que el aficionado, con conocimiento de causa, es el primero en criticar aquello que funciona mal en el ámbito taurino y que de no ser por la Fiesta nacional el toro bravo no existiría hoy en día acampando en plenitud las dehesas españolas, entre otras muchas cosas.