SUDAMÉRICA
Argentina recupera el aliento tras el aplazamiento del pago de la deuda
Por Raquel González
2 min
Economía08-09-2002
Argentina ya no pudo aguantar el ritmo de devolución de créditos a sus acreedores privados y a finales del año pasado suspendía los pagos de esta deuda. De momento, el país ha estado cumpliendo los plazos de crédito con los organismo internacionales, pero el pago de 2.780 millones de dólares a los organismos internacionales de crédito que vencía a lo largo de este mes era ya misión imposible.
Para cumplir con esta cita pecuniaria el Estado argentino hubiese tenido que echar mano a unas reservas del Banco Central muy mermadas que hubiesen dejado al país casi sin efectivo para políticas sociales y económicas. El suspenso del pago de la deuda externa a los organismos de crédito internacional estaba asegurado. Pero el FMI ha decidido prorrogar en un año el pago de los casi 3.000 millones de dólares que Argentina debe al al Banco Mundial, al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y al propio FMI. En el aplazamiento de los pagos es en lo único en lo que el FMI está siendo indulgente con Argentina, ya que el organismo se muestra reacio a ofrecer nuevas ayudas económicas al país. “El plan de Lavagna (ministro de Economía argentino) no alcanza para que el FMI autorice más préstamos”, así de tajante se ha mostrado Paul O’Neill, secretario del Tesoro de EE.UU. No es la primera vez que desde EE.UU. se critica el sistema político argentino y se lo pone como el primer impedimento a la cesión de nuevos créditos al país. Ante las críticas, el Gobierno de Eduardo Duhalde se ha mostrado desairado y ha aconsejado a los ciudadanos que no hagan caso de esas palabras y que se fijen en las cifras y vean cómo la situación está mejorando. Las cifras a las que se refiere Duhalde son las que marcan el aumento del 16 por ciento de la recaudación fiscal que han conllevado un superávit en los últimos meses de 90 millones de dólares. Pero hay otras cifras que delatan que aún queda bastante para que todo marche bien. El 53 por ciento de los argentinos están atrapados por la pobreza, según un informe elaborado por el Gobierno. Según este mismo estudio, el 70,3 por ciento de los menores de 14 años que habitan en el país es pobre o indigente.