Lo ha dicho el ex presidente del Gobierno Felipe González de su propio compañero de partido y actual líder del PSOE. "Rectificar es de sabios y de necios tener que hacerlo a diario". Estas palabras han caído como una losa en La Moncloa una semana después de que Zapatero tuviera que corregir en cuestión de 24 horas una de las medidas aprobadas y publicadas en el BOE para reducir el gasto público. Un lunes prohibió a los ayuntamientos endeudarse y al día siguiente aplazó la medida hasta el año que viene.
Las palabras de Felipe González, que gobernó este país durante cuatro legislaturas y 13 largos años, son un torpedo en la línea de flotación de Zapatero. Su credibilidad ya estaba bajo mínimos antes de que González le llamara "necio" de forma muy sútil y de que otro socialista, el andaluz José Antonio Griñán, reconociera que es "malo" como gobernante.
Pero las palabras de Felipe González son todavía más duras si se leen con detenimiento: "Los políticos no resisten esa inmediatez (de los medios de comunicación), y como no la resisten son cambiantes y se adaptan a lo que la opinión pública va a decir en cada momento. En algunos casos se adaptan porque creen que es más democrático y en otros casos se adaptan porque han perdido el pudor y les da igual decir hoy una cosa y mañana otra". "Ha bajado el nivel de las ideas y ha crecido mucho la dependencia por lo inmediato".
Está claro, a la vista de lo que piensa Felipe González, que su sucesor al frente del PSOE se comporta como una veleta. Cambia de opinión y de criterio según sopla el viento. Así es difícil dirigir un país en tiempos de crisis económica, es complicado generar confianza y resulta imposible aportar estabilidad a las instituciones.
En el Congreso nos hemos quedado de piedra al escuchar a Felipe González, que durante tantos años fue admirado en esta casa. Luego, salió por la puerta de atrás. Pero parece que sigue teniendo las ideas bien puestas y no le importa decir en público lo que piensa de sus propios compañeros. Quizá sea su particular modo de reclamar un relevo en su partido para que quiten de inmediato a Zapatero y busquen un nuevo líder con más cabeza y más talento.