ME SALVó UNA LáGRIMA (A. Lieby, H. Chalendar, Drama)

El extraño síndrome de Bickerstaffy

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Me salvó una lágrima

Autor: A. Lieby, H. Chalendar

Editorial: Temas de Hoy

Género: Drama

Páginas: 192 páginas

Precio: 16,50

“Todo está negro. Estoy en la negrura. Una negrura total, sin el menor matiz,sin el menor atisbo de luz. Una negrura aterradora o tranquilizadora, no lo sé. Es igual que la de mi infancia, cuando me encerraba en un armario para sentirme a salvo, al mismo tiempo que asustada...”.

Así comienza este espectacular relato de una vivencia espeluznante, de un caso clínico excepcional para la ciencia. Angèle Lieby, una de las autoras, acudía a trabajar como cada día, cuando comenzó a sentir picores en los dedos y un fuerte dolor de cabeza que la llevaron a ingresar en un hospital de Estrasburgo. Lo que parecía ser algo banal, estaba a punto de cambiarle la vida.

Angèle tuvo que ser inducida al coma para intubarla y al tercer día, cuando estaba previsto que despertara, no lo hizo, o al menos eso creyeron los médicos que la trataban. Angèle se encontraba consciente, en plenas facultades mentales, pero sin poder dar señales de vida. Sentía, escuchaba, pero no podía moverse ni abrir los ojos.

Una pesadilla que la hizo testigo de crueldades que el personal médico contaba delante suyo, los dolores provocados por las operaciones realizadas, sin ningún tipo de anestesia, e incluso verse en peligro de muerte por un diagnóstico médico que pedía su desconexión de las máquinas que la mantenían con vida. Un calvario que la llevó a la más absoluta soledad junto a su marido y su hija.

Un milagro le devolvió la vida. Una lágrima cayó por su mejilla el día antes de su aniversario. Angèles sufría el excepcional síndrome de Bickerstaffy. A diferencia del síndrome de cautiverio, (conocido desde el libro de Jean-Dominique Bauby, La escafandra y la mariposa), en el que los pacientes también están paralizados y conscientes, este síndrome es reversible.

La idea de este libro, parte de la relación entre el periodista Hervé Chalendar y la propia Angèle Lieby. Cuando Chandelar conoció la historia de esta mujer, quedó emocionado y no dudó en escribir el relato para su diario. La noticia tuvo tal relevancia que obtuvo el Premio Hachettet. Chandelar y Angèle Lieby decicdieron entonces lanzarse a escribir esta obra única y llena de esperanza para evitar futuros casos.

Este Bestseller ha ocupado durante varias semanas un puesto en las listas de las obras más vendidas en Francia. Una auténtica lección de vida, amor y coraje.

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