Han pasado seis años desde su último trabajo, Luna caliente. Una película con la que Vicente Aranda daba fin a su carrera como director. El cineasta ha fallecido a los 88 años, dejando el recuerdo de sus películas, las cuales le han llevado a ser considerado uno de los directores más importantes de España y ganador del Goya por el largometraje Amantes.
Sus películas se caracterizaban por la temática erótica, aunque también trabajó el drama histórico, obras literarias y género fantástico. Vinculado en el inicio de su carrera con la Escuela de Barcelona, propia de los años 60, pronto comenzó a mostrar su estilo personal, en el que destacaban la infelicidad, el sexo, la violencia y la dependencia, entre otros temas.
Sus primeros pasos en el mundo de la dirección de cine fueron con Brillante porvenir, codirigida con Román Gubern, y Fata Morgana. Estos primeros trabajos fueron los de un joven cineasta, muy nervioso y preocupado por cada detalle, como bien recordó el director en algunas entrevistas.
Otras películas que Aranda dirigió en aquella época y con las que se apreció su evolución como director más independiente fueron Las crueles, La novia ensangrentada, Cambio de sexo y La muchacha de las bragas de oro.
Pero no fue hasta los años 80, cuando Vicente Aranda alcanzó el verdadero éxito. En aquella década rodó Asesinato en el Comité Central, Fanny Pelopaja y Tiempo de silencio. Su primera nominación como director a los Premios Goya la obtendría con El Lute: camina o revienta, protagonizada por Imanol Arias. En cambio, la secuela, El Lute II: mañana seré libre, fue nominada a la Palma de Oro del Festival de Cannes.
Tuvo que esperar hasta Amantes para llevarse el Goya al mejor director. Basada en hechos reales, cuenta la historia de un joven que acaba de terminar el servicio militar y se encuentra en una encrucijada, pues no sabe a quién escoger: si a su novia o a su amante. Esta película también se llevó el Goya a la mejor película y ganó el Fotograma de Plata, además de que Victoria Abril obtuviese el Oso de Plata a la mejor actriz en el Festival Internacional de Cine de Berlín.
Posteriormente, dirigió El amante bilingüe, Intruso, La pasión turca, Libertarias, La mirada del otro y Celos. Uno de sus trabajos más populares y reconocidos fue Juana la Loca, recibiendo doce nominaciones a los Premios Goya, de las que solo se llevó tres estatuillas, entre ellas la de mejor actriz, algo que consolidó la carrera de Pilar López de Ayala.
Vicente Aranda siguió dirigiendo películas hasta 2009. Todos lo recordarán por ser el director de Amantes, pero para él solo era un trabajo más.
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