Alemania y Portugal abrieron el debut del grupo G en el Mundial. Todo hacía presagiar que sería un partido de infarto en el que los dos equipos sacarían lo mejor de sí mismos para llevarse los tres puntos. Sin embargo, a Portugal, ya desde la primera parte, se le fueron torciendo las cosas cuando a la media hora de juego Pepe fue expulsado al ver la tarjeta roja.
El comienzo del partido fue muy igualado, Portugal dispuso de dos acercamientos a la portería germana. Ronaldo tuvo la ocasión de adelantar a los lusos con un disparo potente que sacó Neuer. Tras el penalti que el colegiado pitó tras un forcejeo entre Pereira y Götze, los alemanes se hicieron con el control absoluto del partido y daría comienzo el festival de goles de la selección alemana y la desesperación del astro portugués Cristiano Ronaldo.
El penalti en contra se unió a la lesión de Hugo Almeida y la expulsión de Pepe en una acción que el alemán Müller exageró, poniendo de relieve el enfado del central madridista que acabó encarándose él. Sin duda no fue la noche de los portugueses, pero mucho menos la de Pepe. Su primer balón fue un rechace sencillo que tiró a corner. Se llevó una bronca de su compañero Bruno Alves en una jugada en la que Özil se desmarcó en el área y remató Müller. En una de las llegadas del conjunto alemán de nuevo Müller provocó un saque de esquina que remató Hummels marcando el segundo gol de Alemania. Todos los jugadores portugueses fallaban, Bruno Alvés falló en un despeje que Müller mandó a la red con un fuerte zurdazo y que supuso el 3-0 en el marcador.Aún quedaba la mitad del partido pero el encuentro ya estaba prácticamente sentenciado a favor de los germanos.
En el segundo tiempo, Alemania se encargó de tener el balón y de jugar al toque sin hacer más daño a los lusos. Portugal no bajó los brazos y Cristiano buscaba continuamente su gol de gloria que finalmente no encontró y que hizo que el madridista terminara ofuscado. A la baja de Hugo Almedia se unió la de Coentrao, que con intención de llegar a un balón casi imposible estiró la pierna y se dejó el aductor. Alemania puso el broche de oro al encuentro con un gol del delantero de Bayern. Una mala salida de Rui Patricio fue aprovechada por Thomas Müller que puso el 4-0 definitivo y el tercero en su cuenta particular. Fue la guinda del pastel que Alemania puso a un encuentro en el que los lusos acumularon desgracias durante los noventa minutos.