Paraguay se impone en los penaltis a Japón

Zarek Boda.- Intensidad y nervios. Así se podría definir el choque protagonizado por Japón y Paraguay. Ambos equipos mantuvieron un nivel alto de juego, aunque fueron los sudamericanos los que se acabaron llevando el triunfo final. El equipo nipón jugó al contraataque durante todo el encuentro, mientras que su rival ejercía su dominio en el medio del campo. Finalmente, y tras 120 minutos de juego, los penaltis dieron a Paraguay el pase a los cuartos de final

Paraguay 0(5)- Japón 0(3)
El partido comenzó con la una igualdad máxima. Japón lo intentó desde el primer minuto, pero el disparo de Yoshito Okubo se marchó desviado. El equipo nipón se mostró muy colocado en todo el campo, y Paraguay pasó verdaderos momentos de apuro al ver que no podía hacer daño a su rival. La primera ocasión de peligro para los sudamericanos la tuvo Lucas Barrios, pero no acertó cuando se encontraba solo ante el portero. Tras su primera aproximación, Paraguay logró desprenderse de los nervios iniciales y se fue en busca del gol. Parecía que la presión de los japoneses comenzaba a pasarles factura, lo que permitió a Paraguay hacerse con el control del juego. Sin embargo, el equipo oriental seguía creando peligro mediante los contraataques, y dio más de un susto a los hombres de Gerardo Martino. Keisuke Honda tuvo en sus botas el cero a uno, pero su disparo se fue fuera. El delantero japonés pecó de egoísta, ya que su compañero Okubo se encontraba libre de marca.
Tras el descanso, ambos equipos mantuvieron el esquema de juego de la primera mitad. Paraguay volvió a ejercer su dominio en el centro del campo, mientras que Japón esperaba su oportunidad a la contra. Edgar Benítez tuvo la oportunidad de desempatar el choque, pero su durmió antes del remate, y acabó desperdiciando una clara ocasión de gol. Instantes después, la oportunidad iba a ser para los nipones. Marcus Takata a punto está de marcar con un gran cabezazo a la salida de un córner. Los cambios no se hicieron esperar, y el más ambicioso fue el entrenador de oriental, que dio entrada a Shinji Ozakaki, pichichi de la liga japonesa. Todo parecía indicar que el partido llegaría a la prórroga, pero Japón intento evitarlo a toda costa pero sin fortuna. Tras finalizar los 90 minutos, los jugadores descansaron y se refrescaron para poder soportar la media hora que les restaba del final.
La primera mitad de la prórroga mostró a dos equipos que llegaron muy justos de fuerza. Sin embargo, Paraguay decidió tirar del carro y se fue en busca del gol. En uno de los muchos centros que hicieron al área nipona, Édgar Barreto estuvo a punto de marcar. Tras el pequeño descanso y el cambio de campo, Japón intentó crear peligro a balón parado. Buscaban las faltas al borde del área, pero el colegiado no picó. Los minutos pasaban y nadie era capaz de deshacer la igualada inicial, por lo que los penaltis dictarían sentencia. Un fallo de Yuichi Komano desde los once metros puso en bandeja el triunfo para los sudamericanos. El cinco a tres definitivo lo materializó Óscar Cardozo. De esta manera, Paraguay se clasificó para los cuartos de final y se las verá con el ganador del España-Portugal.