Grupo B: La Argentina de Messi, una de las grandes favoritas
David Aguilar-Amat.- El grupo B lo comanda una de las favoritas al título, la Argentina de Diego Armando Maradona. Leo Messi y compañía deberán medir su potencial ante Corea del Sur, dirigida por Huh Jung-Moo, la Grecia de Otto Rehhagel y Nigeria, comandada por Lars Lagerback. Las cuatro selecciones pelearán por dos puestos para octavos de final de los que uno parece tener claro color albiceleste.
Argentina
Son los favoritos del grupo y uno de los principales candidatos a llevarse el Mundial. De lograrlo, sería su tercera corona. Su clasificación para Sudáfrica 2010 no fue fácil. En las eliminatorias empezó bajo la dirección de Alfio Basile y luego le relevó Diego Maradona. Ambos entrenadores tuvieron inconvenientes con los resultados y con el juego pero finalmente obtuvieron una plaza directa al derrotar en el último partido a Uruguay con un gol de Martín Palermo. Su juego se caracteriza por esperar atrás y tratar de aprovechar la velocidad de sus hombres –Gonzalo Higuaín, Sergio Agüero, Ángel di María, etc. – a la contra, cosa que no gusta mucho a los aficionados albicelestes, quienes siempre demandan un juego bello. La estrella de Argentina es, sin duda alguna, Lionel Messi. La Pulga, figura máxima en el Barcelona, está considerada por muchos como el mejor futbolista del mundo y, si bien no ha explotado aún con la camiseta de su selección, todos esperan que lo haga en la gran cita mundialista. Junto a él guiarán a la selección Javier Mascherano, capitán y líder del mediocampo, y el experimentado Juan Sebastián Verón.
Corea del Sur
Corea de Sur no falló y disputará en Sudáfrica su séptimo mundial tras clasificarse con más apuros de los previstos. Los surcoreanos no perdieron ningún partido, pero tuvieron muchos problemas para ganarlos. Finalmente un triunfo frente a Emiratos Árabes Unidos les dio el pase tras una serie de fallos de ambos conjuntos. Su juego se caracteriza por ser directo y rápido, ideado por Huh Jung-Moo, entrenador surcoreano. Carecen de grandes jugadores a nivel mundial y de poca calidad en su juego, aunque lo compensan parcialmente con su extraordinaria resistencia física. La estrella del equipo es el capitán Park Li-Sung. El centrocampista del Manchester United es una estrella en su país y uno de los supervivientes de los que sorprendieron en el Mundial de 2002, donde llegaron a las semifinales, eso sí, con ciertas ayudas arbitrales. Además de mover la pelota con criterio, tiene llegada y gol, como demuestran sus cinco tantos en la fase de grupos. A su lado, Park Chu-Young será el encargado de resolver ante la meta contraria.
Grecia
Grecia disputará su segundo Mundial en toda su historia 16 años después de jugar el último. Tras no clasificarse directamente a la cita mundialista, tuvo que acudir a la repesca, donde eliminó a Ucrania en una eliminatoria muy igualada. De la mano del alemán Otto Rehhagel, que se ha convertido en toda una divinidad en Grecia tras conseguir ganar la Eurocopa, intentarán dar la campanada y hacer algo grande en este Mundial. Su juego se caracteriza por una firme y fuerte defensa que permite a los griegos encajar pocos goles. Con todo, al ser un equipo muy defensivo, no llega arriba con demasiada claridad ni la calidad suficiente para poder hacer daño al rival. La veteranía es un grado y eso no le va a faltar al conjunto griego en Sudáfrica. Sotirios Kyrgiakos, el jugador que más minutos ha jugado en los clasificatorios, y el capitán Giorgios Karagounis serán la base de un equipo que tendrá como punta de lanza a Theofanis Gekas, máximo goleador de la fase de clasificación europea con diez goles, y a Angelos Charisteas, autor de cuatro tantos.
Nigeria
Las expectativas de Nigeria en el Mundial de Sudáfrica son bastantes moderadas. De la mano de Shaibu Amodu consiguieron clasificarse, pero el entrenador africano fue destituido y su lugar lo ocupó el sueco Lars Lagerback. Un sorprendente empate a cero en su primer partido de la ronda final de clasificación africana contra Mozambique relegó a Nigeria al papel secundario de perseguidor de Túnez desde el principio de la carrera, y sus tablas consecutivas contra los tunezinos empujaron a los nigerianos hasta el borde de la eliminación. Pero entonces Túnez perdió en Mozambique, y Nigeria remontó dos veces un gol en contra en Kenia para acabar tomando la plaza. El delantero Obafemi Martins es el héroe de la su equipo, tras sellar con sus goles el pasaje de Nigeria para Sudáfrica. A pesar de clasificarse in extremis los nigerianos tienen motivos para acudir a la cita con una actitud positiva. Se caracterizan por un ataque veloz y dinámico, con figuras como Martins, Yakubu Aiyegbeni, Peter Odemwingie y los jóvenes Victor Obinna e Ikechukwu Uche. Atesoran menos calidad en defensa, pero Jon Obi Mikel se encarga de consolidar la línea media. En un grupo tan competitivo, no tendrán fácil clasificarse para octavos, pues les faltan más jugadores con experiencia internacional y algo de calidad.