Pablo Fernández.- El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, y el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Shlomo Ben Ami, se reunieron la madrugada del pasado jueves 14 de diciembre. Este encuentro abre nuevas esperanzas a un acuerdo.
Esta es la primera reunión que ambos líderes mantienen desde que comenzó la última Intifada, hace dos meses y medio. Aún no se ha sacado nada en claro del encuentro. Parece que Israel está dispuesto a ser más flexible en sus exigencias. Los israelíes pueden ceder en asuntos clave para los palestinos: la soberanía en Jerusalén Este y el estatuto de los colonos judíos de Gaza y Cisjordania. En los próximos días celebrarán más reuniones.
Las razones de este cambio de actitud en ambas partes pueden ser varias. Al primer ministro israelí, Ehud Barak, le preocupan las próximas elecciones de su país y pretende conseguir popularidad y votos al presentarse como el hombre que logró acabar con la Intifada. Precisamente, los disturbios han aumentado en los últimos días y más de 15 palestinos han muerto en los enfrentamientos con el Ejército de Israel. Entre ellos está Samij al-Málabi, de 28 años, dirigente del partido gubernamental palestino Al Fatah.
A Yasir Arafat también le interesa ponerse de acuerdo con el primer ministro israelí antes de los comicios. De no ganar el laborista Barak, más dialogante y transigente con los palestinos, tendría que negociar con el candidato del Likud, partido conservador contrario a cualquier tipo de acercamiento de posturas con los palestinos.
Además, el pasado miércoles 13 de diciembre el Parlamento israelí aprobó la llamada "Ley Netanyahu". Con ella se hace posible que el antiguo primer ministro conservador Benjamin Netanyahu pueda volver a optar al cargo en las elecciones anticipadas previstas para febrero. Existe otra razón que empuja a agilizar las conversaciones de paz. El actual presidente estadounidense, Bill Clinton, abandonará la Casa Blanca el 20 de Enero y se cree que su sustituto, el republicano George W. Bush, no pondrá la misma dedicación que Clinton en este asunto.
[17-12-2000]