Paula Pons Martínez.- Las petroleras españolas Repsol y Cepsa, con una cuota de mercado del 45 y del 25 por ciento respectivamente, continúan con el abaratamiento de sus productos iniciado la pasada semana. La caída en el precio del crudo y la revalorización por la que atraviesa el euro han sido los detonantes para que Repsol aplicara una rebaja de tres pesetas al precio de todas las gasolinas y dos en el caso del gasóleo, mientras que Cepsa ha reducido dos pesetas el precio en todos sus carburantes.

Después del recorte, el segundo que hacen las estaciones de servicio en una semana, Repsol vende la gasolina sin plomo de 95 octanos a un precio medio de 138,7 pesetas y la de 98 octanos a 153,7 pesetas litro, la súper se sitúa en 149,7 pesetas. En cuanto al gasóleo de automoción, que permanecía sin variaciones desde octubre, mes en el que subió nueve pesetas, se vende ahora en la red de gasolineras de Repsol a 127,2 pesetas. La petrolera no aplicaba un descenso en el precio del gasóleo desde abril, cuando lo redujo una peseta.
Por su parte, Cepsa ha fijado sus precios del siguiente modo: gasolina sin plomo de 95 octanos 139,9 pesetas, sin plomo de 98 octanos 153,9 pesetas, gasolina súper 149,9 y gasóleo de automoción (127,9). El barril de petróleo brent, crudo de referencia internacional, lleva acumulado un desplome de casi ocho dólares (24 por ciento) en las últimas dos semanas, y actualmente se mantiene en un precio medio de 27 dólares por barril.
Otra buena noticia para los automovilistas es la rebaja del impuesto de matriculación para familias numerosas, que ha aprobado el Senado en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos. Una familia con tres o más hijos que compre cualquier tipo de vehículo, a excepción de los biplaza y de los todoterreno, pagará el seis por ciento en concepto de impuestos de matriculación y no el 12 por ciento como se paga actualmente. Esta medida entrará en vigor a partir del 1 de enero del 2001.
[13-12-2000]