Juan Martín Muñoz.- En su primer discurso, González Ferrari se mostró ambicioso y capaz de hacer desaparecer el déficit del Ente Público: "Mi objetivo no es reducir la deuda sino acabar con ella". Ferrari apeló a la responsabilidad de todos para que nadie cuestione "la viabilidad del medio de comunicación, cuyo objetivo fundamental es dar un servicio a la sociedad".

Ferrari habló de dialogar con las fuerzas políticas, agentes sociales y los trabajadores del grupo público de comunicación. De los proyectos de futuro, el nuevo director general no quiso develar sus intenciones, pero definió unas líneas a seguir: "Hay que hacer una radiotelevisión pública posible y dotada de los medios suficientes para que no se vuelva a cuestionar más su futuro".
Al acto asistieron el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, y el ministro portavoz del Gobierno y ex director general de RTVE, Pío Cabanillas, que en su discurso hizo un repaso de los últimos años al frente del grupo estatal y remarcó la importancia de las audiencias, los ingresos publicitarios y el desarrollo de los canales temáticos "Esta casa tiene que ser fuerte porque es la cohesión social y territorial del país".
González Ferrari, que hasta ahora ocupaba la dirección de informativos de TVE, asume su nuevo cargo con la seguridad de recoger un listón "muy alto". Ferrari aseguró que "desde lo alto de la pértiga se siente vértigo".
Entre los asistentes también estuvieron los ex directores generales durante la legislatura de Partido Popular, Mónica Ridruejo y Fernando López Amor, además de la presidenta de la Comisión del Control del Ente Público, Carmen Alboch, entre otros.
[17-5-2000]