J. Esteban Gómez.- A Ferrari le salió esta vez el tiro por la culata. La estrategia de la escudería italiana de cargar a medias los depósitos de combustible de sus monoplazas no resultó. Michael Schumacher y Rubens Barrichello se vieron sorprendidos por el poderío de los McLaren, que aprovecharon las excesivas paradas en boxes de los Ferrari para hacerse con los dos primeros puestos del cajón.

Y eso que Schumacher empezó de salida imponiendo un ritmo de carrera rapidísimo, gracias a la ligereza de su coche. El alemán lideró los inicios de la carrera sin problemas. Sin embargo, la ventaja que había obtenido sobre el Mercedes de Hakkinen se vio drásticamente reducida cuando se topó con Irvine a la salida de boxes de éste. El irlandés frenó al piloto de Ferrari, lo que hizo que Schumacher parara en boxes para repostar.
La parada le hizo perder, además de un mecánico del equipo, el primer puesto a favor de Hakkinen, aunque rápidamente lo volvió a recuperar. Por detrás, la lucha también era implacable, con los coches de Ralph Shumacher, Barrichello y Coulthard en un puño. El punto de inflexión de la carrera quedó marcado cuando los cuatro pilotos que comandaban la carrera pararon en boxes.
Primero pararon Barrichello y el pequeño de los Schumacher, que salió primero de la parada, pero que se vio sorprendido por Coulthard al incorporarse a la pista en una maniobra arriesgadísima que estuvo a punto de provocar un accidente. Seguidamente, pararon juntos Hakkinen y Michael Schumacher, que tuvo un problema con la manguera de la gasolina que le hizo perder el primer puesto a favor del finlandés.
La carrera se puso emocionante en su último tercio. Hakkinen controló el primer lugar sin agobios, haciendo una carrera limpia y efectiva que le dio la victoria. El lío estaba por detrás, con un Coulthard lanzado que superó a Michael Schumacher para acabar segundo, y con un último duelo entre los hermanos Schumacher y Barrichello, que acabó con el brasileño en el tercer puesto del cajón.
Los españoles tuvieron una pobre actuación. De la Rosa perdió todas las opciones en la segunda vuelta, al chocar con Alesi y perder la bigotera; mientras que Marc Gené nunca tuvo la posibilidad por optar a un buen puesto, entrando finalmente en meta en el puesto 14º.
[7-5-2000]