David Hurtado.- El ministro de Asuntos Exteriores israelí, David Levy, ha confirmado oficialmente, en una carta dirigida al secretario general de la ONU, Kofi Annan, que antes del 7 de julio Israel se retirará de la zona que ocupa en el sur del Líbano. Esta es la primera vez que el gobierno israelí fija una fecha concreta para la retirada de la "zona de seguridad", una franja de 15 kilómetros que ocupa desde 1985.

La operación de la retirada israelí tendrá lugar de una sola vez para cumplir con las resoluciones aprobadas por la ONU en 1978 después de la incursión israelí en el Líbano. Israel mantuvo una "zona de seguridad" de 15 kilómetros de ancho en su frontera con el Líbano desde 1985, cuando retiró gran parte de las fuerzas que participaron en la invasión de 1982, una operación que tenía como objetivo la eliminación de los guerrilleros palestinos.
El representante israelí ante la ONU, Yehuda Lancry, entregó la decisión a Annan en la reunión que mantuvo con el secretario general de la organización mundial y dijo esperar la completa aplicación, por todas las partes, de los principios que integran las resoluciones relacionadas con la retirada israelí, es decir, "la instauración de la paz y la seguridad internacional y el restablecimiento de la plena soberanía del Líbano".
El documento del ministro israelí afirma que entre 3.000 y 4.000 miembros y familiares de la milicia proisraelí del Ejército del Sur del Líbano serán trasladados a Israel para evitar represalias de los fundamentalistas de Hezbolá. Precisamente, tres días después del anuncio de la retirada israelí, la organización fundamentalista hizo estallar dos cargas explosivas cerca de la valla fronteriza que separa el Líbano de Israel. Una de las bombas dio muerte a un soldado del Ejército del Sur del Líbano, mientras que la segunda hirió a otros tres soldados israelíes y provocó graves daños al tendido eléctrico, dejando sin suministro a varios poblados de Galilea.
El objetivo que se ha marcado Hezbolá es sabotear la evacuación de las tropas israelíes del territorio libanés. Esta situación que a priori puede parecer contradictoria, se fundamenta en el temor de los jefes fundamentalistas de que el repliegue israelí prive al movimiento de su razón de ser y que el apoyo que reciben de los habitantes del Líbano meridional desaparezca.
[18-4-2000]