Alberto Escalante.- José María Aznar celebró un Consejo de Ministros extraordinario para fijar definitivamente la fecha que ya se barajaba desde hacía tiempo. A continuación visitó al Rey en el Palacio de la Zarzuela para comunicarle la decisión de su Ejecutivo. Poco después comparecía ante los medios de comunicación para decir que quiere una campaña "limpia, sensata y llena de contenidos".

En la misma rueda de prensa Aznar tuvo tiempo para hacer un balance de la que ha sido la legislatura más larga de la democracia en España. Para el presidente estos años se han caracterizado por "el diálogo plural, el logro de acuerdos básicos para la estabilidad política y el crecimiento económico". Sobre su futuro político -hace cuatro años dijo que no sería presidente durante más de dos legislaturas seguidas- Aznar no quiso que se especulase pero dijo que "si no la palmo antes, elecciones generales me pienso presentar a unas cuantas", aunque repitió que no repetiría como candidato si gana el 12-M.
Su principal rival en estos comicios, Joaquín Almunia, también ofreció una rueda de prensa en la que hizo una valoración muy distinta de estos cuatro años de gobierno popular. Para Almunia Aznar deja "una España más frágil y con menos peso internacional", además, "el Gobierno ha desaprovechado la oportunidad que le ha brindado el crecimiento económico para buscar una más justa distribución de la riqueza, reducir la desigualdad social y llevar adelante políticas de inversión que garanticen un mejor futuro para la inmensa mayoría".
El líder socialista volvió a pedir un debate televisado entre él y Aznar, algo que el candidato de Izquierda Unida, Francisco Frutos matizó pidiendo "debates públicos con la participación de los líderes de las otras dos fuerzas políticas de ámbito estatal".
[17-01-2000]