SE CUMPLEN 20 AÑOS DE LA CAÍDA DEL MURO DE BERLÍN

El día que se fundió el telón de acero

Ya hace 20 años. El 9 de noviembre de 1989, Occidente volvió a unirse con el bloque oriental. Había caído el muro de Berlín y una parte de la historia universal iba a cambiar. Muchos sostienen todavía que el muro no cayó simplemente, sino que fue la constancia y la lucha silenciosa de millones de personas las que lo fundieron hasta derretirse.

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La Puerta de Branderburgo, que durante décadas separó a las dos ciudades

Gracias a la caída del muro de Berlín, los alemanes llevan 20 años cruzando cualquiera de las fronteras de la Alemania Democrática (RDA) libremente, sin necesidad de contar con permisos especiales. La antigua república casi inmediatamente desaparecería integrada en una nueva Alemania. Ello generó la reunificación de Alemania, perdida después de la Segunda Guerra Mundial y también la esperanza y la destrucción de uno de los mayores símbolos del siglo XX.

En el mismo momento que se dio a conocer la noticia, muchos berlineses llegaron a toda prisa al muro con la ilusión de que por fin iban a poder abrazar a los suyos que se encontraban al otro lado. Y sin creerlo, allí estaban emocionados ante lo que nadie se esperaba que un día ocurriera: la libertad.

Pero que esto se llevara a cabo no fue porque de repente los políticos se convirtieron en buenos, todo lo contrario. No les quedaba otro remedio que afrontar las constantes demandas que el gobierno recibía, por lo que su única salida era derrumbar el muro de Berlín y reunificarse a Alemania.

DISCREPANCIAS POR LA REUNIFICACIÓN

Los muros de la ciudad se han convertido en una fuente se inspiración y expresión artística

No todo el mundo estaba de acuerdo con la nueva unificación y, en noviembre de 1989, se produjeron manifestaciones masivas y pacíficas en ciudades como Berlín del Este, Leipzig, Dresden y Halle, en las que miles de alemanes exigían la dimisión del poder, así como la celebración de elecciones libres y otras reformas.

Y es que las tensiones aumentaron cuando el 2 de mayo de 1989 los soldados húngaros eliminaron las barreras que tenían con Austria y los alemanes se adentraron al mundo occidental enfadando a sus vecinos.

Ahora, 20 años después, se puede observar cómo después de tanto dolor Alemania es un país que poco a poco ha ido avanzando en una economía de unidad y también se puede percibir que es un país que se siente orgulloso y con una alta autosatisfacción. Pero, en cambio, diferentes políticos opinan que todavía está lejos de encontrar la unidad interna en cuanto a la sociedad.

Ahora, con motivo del 20 aniversario, se van a realizar diferentes conmemoraciones en el Festival de la Libertad. Entre las celebraciones se encuentra el concierto de la orquesta Staatskapelle Berlin, dirigida por Daniel Barenboim y que interpretará música de Beethoven, Wagner, Schönberg y Goldman.

Este monumento homenajea a las personas que fueron asesinadas por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial

Entre las exposiciones, destacan la del Museo Nacional de la Historia de Alemania (Deutsches Historisches Museum) con la exposición Art of two Germanys/ Cold War Cultures o The story of Berlín en Kurfürstendamm, o la exposición en la estación y en los vagones del tranvía Marienfelder Allee, que recoge las peripecias de los ciudadanos del Este en su esfuerzo por cruzar al otro lado; entre otras muchas más. Además, también algunos jefes y ex jefes de estado, como Sarkozy, Medvédev, Brown, Clinton, Merkel y el alcalde de Berlín Wowereit, darán un discurso sobre los Derechos Humanos.

El gran día también cuenta con un dominó de un kilómetro y medio de longitud, compuesto por un millar de piezas de unos 2,5 metros de alto y 20 kilos de peso, que se derribará en tres fases. Mientras las fichas estén en movimiento, los espectadores escucharán los Tres Tenores interpretado por Die Freiheit y Jon Bon Jovi presentará su nueva canción. Pero no serán los únicos, Paul van Dyke interpretará la canción We are one junto a otros artistas nacionales e internacionales.

Con la caída de la última parte del dominó, un espectáculo de fuegos artificiales iluminará el cielo de una ciudad que ahora vive reunida pero que durante más de tres décadas estuvo partida en dos, en la que murieron cientos de personas tratando de cruzar al otro lado y en la que el drama de la postguerra sacó lo peor de los hombres. Aquello ya es historia. Hace 20 años comenzó una nueva era para Berlín y para Alemania.

El día que se fundió el telón de acero